Días de dudas y concesiones

Las obligaciones suelen servir para aplicar intensidades diferentes y eso es lo que ocurrió en el Álvarez Claro de Melilla en un derbi norteafricano que el Ceuta nunca aspiró a llevarse.  

Resulta llamativo que con un equipo semejante al que jugó ante el Almería B la semana anterior, el cuadro de Sergio Lobera se viese superado de forma contundente por un adversario que se jugaba sus opciones de seguir en la zona de privilegio de la clasificación. La búsqueda de un objetivo dejó claro qué equipo iba a llevar la iniciativa y pensaba recoger las máximas papeletas para ganar.
Hubo más. La falta de tensión no fue en este caso un hilo favorable. Dos goles en diez minutos de encuentro dejaron la sensación de una historia repetida, la misma que costó puntos en el arranque del campeonato liguero con despistes sin excusas.
Precisamente las premisas de la intensidas son las únicas que podrán favorecer a un final de torneo en forma de victoria ante el Badajoz, próximo enemigo de un Ceuta que ya piensa en otras historias ajenas a la competición.
La situación económica sigue siendo insostenible y son cinco los meses que los jugadores llevan sin cobrar sus salarios. Los interrogantes siguen planeando sobre el cielo de unas instalaciones de San Juan de Aznalfarache que siguen sirviendo de escenario de dudas y concesiones. ¿Quién tiene la pelota sobre su tejado? Los jugadores esperan que haya movimientos en las negociaciones durante los próximos días, aunque muchos esperan con la única esperanza de que el tiempo sea el único elemento capaz de solucionar lo que hasta el momento no varió ni un ápice. Y mientras, queda una jornada deportiva para cerrar un torneo para el olvido de un equipo ya entregado.
La derrota ante el Melilla deja más debates abiertos. Los números del equipo en esta segunda vuelta han propiciado que nunca se tuviera la sensación real de aspirar a recuperar desventajas en la tabla, por lo que la zona media baja de la tabla, en la que terminará la campaña, deja constancia de un objetivo deportivo lejano a lo conseguido. Aislando factores ajenos a lo futbolístico, pese a lo mucho que hayan podido influir éstos en la búsqueda de gloria, el cuadro caballa nunca estuvo cerca de pelear por una misión que hubiese modificado todos los esquemas actuales de planificación. Pero los problemas se multiplican cuando se encuentran acompañados. Y en este caso, nadie tiene la más mínima duda de que este Ceuta está en sus horas más bajas de los últimos años. El choque en el Murube ante el Badajoz pondrá sentencia a una temporada de fútbol, pero será sólo el inicio de otra batalla.

Apuntes

Lobera dio descanso hasta el jueves
La plantilla del Ceuta no entrenará hasta el próximo jueves tras el descanso otorgado por Sergio Lobera a sus jugadores tras el encuentro ante el Melilla del pasado domingo. La idea del técnico aragonés será comenzar a preparar a partir de entonces la cita ante el Badajoz, correspondiente a la última jornada del campeonato liguero de Segunda División B, y que está pendiente de conocer su horario a expensas de que ambos clubes, que no se juegan nada a efectos de clasificación, puedan modificar esa idea inicial de que todos los encuentros se disputen el domingo nuevamente.  

Guzmán ya suma quince goles en su cuenta
Las cifras goleadoras de Guzmán siguen imparables y ante el Melilla volvió a demostrar que es el alma de este equipo. Anotó el gol de los caballas y suma ya quince en su cuenta particular, siendo el segundo máximo anotador de este grupo cuarto pese a jugar como centrocampista por la banda derecha durante toda la temporada.  

Chapi, la principal novedad para el cierre
Chapi Arnau se perdió el encuentro ante el Melilla por sanción y volverá a estar a disposición de Sergio Lobera esta semana para afrontar el cierre de la competición liguera. El lateral podría ser de la partida en un once con demasiadas incógnitas y muchas piezas por elegir.