“Un día va a ocurrir una desgracia que no vamos a poder evitar”

• El coordinador del centro, Francisco Javier Sánchez Paris, dijo que los episodios de inseguridad se están repitiendo en demasiadas ocasiones

• Advierte del problema con las personas que tienen conductas adictivas

Concentración ante la puerta del centro de salud del Tarajal por el intento de agresión a una médica en la jornada del jueves. Varias decenas de facultativos, tanto del propio centro como del Hospital Universitario, representantes sindicales, enfermeros, celadores y el apoyo especial del presidente del Colegio Oficial de Médicos, Enrique Roviralta.

Fue el coordinador médico del centro de salud, Francisco Javier Sánchez París, quien se quejó ante los medios de comunicación de que estas situaciones se estaban repitiendo con una gran asiduidad y “cualquier día va a ocurrir una desgracia que no se va a poder evitar”. Desde su punto de vista, no existe ningún tipo de conflicto con los usuarios de las diferentes barriadas que están adscritos al centro de salud del Tarajal, sino que el problema está con un sector de personas que padecen conductas adictivas y llegan en unas condiciones a las consultas que no admiten ningún tipo de negativa y entonces su agresividad se multiplica. Por esta razón, según su análisis, una de las soluciones que se podría adoptar sería el que existiera una mayor coordinación entre los centros de salud y las dependencias que tiene la Ciudad Autónoma que aborda estas conductas adictivas. Para Sánchez París lo que no parece lógico es que tengan que estar soportando estas situaciones, que no solamente afectan al personal sanitario, sino también a los usuarios y el normal desenvolvimiento de la actividad en este lugar.

Asimismo, la responsable de Atención Primaria en el Colegio de Médicos, la doctora Rosario de la Torre, especificó que se deben tomar medidas, pero su indignación crece más porque entiende que, de alguna manera, no queda más remedio que estas personas reciban un castigo ejemplar cuando cometen una fechoría de esta indole y que no se limite todo a que le detengan, luego esperar el juicio y que se queden en su casa.

El mismo presidente del Colegio Oficial de Médicos, Enrique Roviralta, destacó que el Ingesa debería pactar con la Fiscalía de Ceuta, al igual que ha sucedido en otras comunidades, un acuerdo para que todo este tipo de agresiones se califiquen como atentado a la autoridad, tal y como establece el artículo recientemente reformado del Código Penal.

El juicio será el próximo septiembre

El juicio contra el usuario del centro de salud del Tarajal que intentó agredir a una médica se sentará en el banquillo de los acusados el próximo 12 de septiembre, acusado de un delito de atentado contra la autoridad, que, desde luego, es una petición expresa que realizan los organismos médicos a las autoridades judiciales para que estas personas “no se vayan de rositas”.

Fue la propia médica, la doctora Miralles, que ayer se encontraba declarando en el Palacio de Justicia sobre este asunto, la que informó a sus compañeros que se encontraban en la concentración de que el juicio sería en septiembre y se le acusaría de atentado.

El mismo Sánchez Paris vino a informar a los medios de que esta persona había acudido al centro empecinado en que debían de recetarle una medicación que no figuraba en su historial médico, y que tampoco le había sido recetada con anterioridad por ningún facultativo. Al negarse la doctora fue cuando la amenazó con una navaja. Y recuerda que gracia a la intervención de los vigilantes de seguridad que están de servicio en el centro de salud se pudo evitar “una situación verdaderamente penosa”.

Solidaridad del Colegio de Médicos

El Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Ceuta manifiesta su absoluta repulsa. A este Colegio, han llegado numerosas denuncias de colegiados expresando su malestar y temor por ejercer en estas circunstancias y reclamando un incremento de las medidas de prevención para poder desempeñar su labor de atención a los pacientes en condiciones de seguridad. Señalan que las agresiones al personal sanitario menoscaban gravemente un pilar fundamental de nuestro estado del bienestar como es la sanidad pública, y afecta  a sus profesionales ocasionándoles angustia, miedo, frustración y estrés laboral, lo que les dificulta enormemente su labor asistencial. Comentan que “desgraciadamente esta agresión ni es la primera ni será la última, destacándose en el último año, un preocupante repunte de este tipo de violencia contra el personal sanitario en nuestra ciudad. Las agresiones físicas, las verbales y los ataques en redes sociales, generan una situación insostenible e insoportable para el personal sanitario. Desde la corporación médica se insta a las autoridades competentes para la adopción de medidas eficaces”.