Día Internacional del Perro

Desde los albores de la Humanidad el perro ha sido un incondicional compañero y amigo del hombre. Algunos que otros tenemos muchas cosas que contar sobre este fiel animal que tan buenos ratos nos han hecho y siguen haciendo pasar.

Desde el año 2004 y sin saberse exactamente cómo, quién o quiénes fueron los organizadores de este evento, se celebra en España y en algunos países de Latinoamérica y América del Norte, el “Día Mundial del Perro”. Buena y emotiva iniciativa que muchos celebramos con mucho gusto.

Conocemos muchísimos casos de perros que han trascendido la historia e incluso casos que nosotros mismos hemos vivido con ellos. “¿Quién no recuerda la “historia de Hachico”?”, aquel buen can que espero durante cerca de once años a su tristemente desaparecido dueño, siempre en el mismo sitio. Esto ocurrió en una pequeña ciudad de Japón, donde actualmente y junto a un árbol aparece una escultura en bronce del perro, donde siempre esperó a su dueño hasta su propia muerte. Es un hecho real, siendo la figura muy visitada. Todos los que conocieron a Hachico lo querían y le llevaban agua y comida. El actor Richard Gere lo interpreto a la perfección el ser sueño y amo del dueño. Preciosa película para ver y emocionarse. Hachico falleció en 1935. Conozco a un chico, Hamed, quien, viajando por Japón, llegó a ver la escultura del perro, resultando su visión muy entrañable y enternecedora. Fue una auténtica historia de lealtad.

Pero también casos reales como fue el caso de Canelo aquel perro que estuvo esperando a su dueño en la puerta del hospital a donde éste fue llevado. Esto ocurrió hace unos años en Cádiz capital. Le daban de comer y de beber; el dueño falleció pero Canelo lo siguió esperando durante mucho tiempo. Un buen día y atravesando una calle el perro fue atropellado por un coche. Todos echaban de menos a Canelo. A la entrada del hospital Puerta del Mar hay una placa dedicada a este fiel perro.

También se dan casos en que una persona fallece y el fiel amigo se coloca en su tumba por un tiempo indefinido e incluso llegan a fallecer de tristeza.

“Rin tin tin” fue el nombre que recibieron en el cine varios perros, parientes entre sí de la raza pastor alemán; estrellas de Hollywood de la primera mitad del siglo XX. Protagonizó varias películas e incluso tiene su huella estampada en el paseo de la Fama de Hollywood Boulevard. Fue una etapa muy bonita de nuestra vida infantil la que pasamos muchos de nosotros viendo esta serie.

Otro perro conocido por todos fue “Rex perro policía“ serie que empezó a emitirse en televisión en 1994. Rex era un pastor alemán, perro policía bien adiestrado por su dueño Marco Terzani, comisario de policía, con quien tiene una relación muy amistosa. Rex nos hizo pasar tardes encantadoras por televisión siendo la serie muy solicitada. Fue el perro policía más conocida. Sus aventuras hacían que todos los días quisiéramos verlo en acción. La serie fue rodada en Austria.

Lassie vivó 18 años. Su nombre está asociado con compañerismo e inteligencia, amoroso y bondadoso. La perra llegó a protagonizar una película junto a la gran Elisabeth Taylor. La historia está inspirada en un hecho real, aunque Lassie en realidad fue un perro macho. Se dice que el “Collie” raza a la que pertenece la perra, es la preferida de los niños.

“Colmillo Blanco” es una novela del escritor estadounidense Jack London. Fue publicada en 1906. La historia transcurre en el territorio del Yukón (Canadá) durante la fiebre del oro de Klondike a fines del siglo XIX. Esta novela cuenta las aventuras y desventuras de un animal extraordinario, un cachorro mestizo de perra y lobo que no encontraba su sitio en ninguno de los dos mundos y al que parecía perseguir la desventura a donde se dirigiera. Comillo Blanco era ingenioso y malo. Desarrolló una maldad, una rabia hacia los humanos, una agresividad que solo podía verse reflejada en los perros, porque trababa a los humanos como dioses que lo dominaban todo. Uno de los mensajes que nos deja la historia es que sólo los más aptos sobreviven. Comillo Blanco tiene valores como la amistad, empatía, respeto sensibilidad y respeto por los animales. Fue una de las películas más vistas.

“Togo”, fue el perro líder del equipo de perros de trineo de Leonard Seppala, que llevó la antitoxina diftérica en el tramo más largo y difícil de la Carrera del Suero a Nomen de 1925, a través del hielo de Norton y Sound en el norte de Alaska. Fue un Husky Siberiano que pudo transportar el suero antes citado durante casi 700 millas para salvar a los niños del poblado de Nomen en Alaska, de una epidemia de difteria. Ha sido la última producción de Disney estrenada la película en 2019. Está basada en un hecho real. Togo falleció en 1929.

“Benji” el feliz perro de terapia que hace sonreir a chicos y grandes. Tiene cuatro años; él y su amigo humano, Andrew, suelen visitar un hospital infantil para animar a los niños que están ingresados. Ahora debido al Covid-19, su trabajo ha pasado a ser virtual y han organizado una recaudación de fondos para seguir con el proyecto sea como sea. Lo cierto es que la pareja logra mejorar el día de mucha gente, y no sólo dentro del hospital. Hay un vídeo en el que Andrew compartió en su cuenta de Instagram el que se vea cómo Benji y él disfrutan patinando y a partir de ahí su historia ha dado el salto a los medios. Así Andrew y Benji forman una pareja que demuestran en cada foto lo bien que un perro y una persona pueden pasarlo juntos. Esta película tuvo una candidatura al premio Óscar a la mejor canción original. Hay varias películas cuyo protagonista es este dulce perro.

“Beethoven” (uno más de la familia). Fueron varias las películas que se rodaron teniendo como protagonista a este genial “perro San Bernardo” (otro preferido por los niños). Película entrañables y llenas de ternura, muy familiares y para todos los públicos. Beethoven es adoptado por una familia y ahí empiezan todas las peripecias. El perro fue llamado así por su color café y blanco, en honor al músico nacido tres siglos atrás. Le encantaba escuchar la quinta Sinfonía del genial músico.

Otras películas

El Sargento Perro con el actor Chuck Norry y el perro Nero (policiaca). Genial interpretación, canto a la Amistad.

Socios y Sabuesos con Tomo Hansks y el perro Hooch. Divertida “comedia perruna”. Para pasarlo muy bien.

En dibujos animados de Walt Disney merece la pena recordar “La Dama y EL Vagabundo” donde Reina y Golfo son los protagonistas. Una dulzura de película. “101 dálmata”; son una pareja canina (Pango y perdita) que vive rodeada de sus cachorros y con sus amos; pero su felicidad está amenazada por Cruela de Vill, pérfida mujer que adora los abrigos de pieles.

“PLuto” perro ladrador, personaje de ficción que se dio a conocer en 1930. Era un perro poco patoso pero muy simpático. En 1940 recibió un premio por su trayectoria.

Perros Familiares

A lo largo de nuestra vida hemos podido disfrutar mi familia, hermano y yo de la compañía de diferentes perros. Mi madre nos contaba que cuando era una niña sus hermanos y ella tuvieron un perro al que pusieron por nombre “Relámpago”. Nos decía que fueron muy felices con el animal; nuestro Chico no sabía pronunciar su nombre y lo llamaba “Palago”.

Más adelante, pasado bastantes años pudimos disfrutar de la compañía de “Canelo”; este era un perro callejero que terminó quedándose en nuestra casa. Fue abandonado por la tripulación de un barco. Era grandote y noble, color canela, y le encantaba salir a la calle a darse un paseíto. De vez en cuando traía un “trofeo”, por ejemplo, una rata, siempre golpeando con su pata la puerta de nuestra casa para que le abriéramos. Le asustaban muchísimo los cohetes artificiales y siempre se escondía en algún rincón. Duró más de 16 años. Todas las mañanas, temprano, cuando mi hermano marchaba a dar la vuelta al Hacho Canelo lo acompañaba hasta el final. Lloramos mucho cuando este falleció y no lo olvidaremos jamás. Tenía mezcla de Pastor Alemán.

“Lucero”. Era blanco y marrón clarito. No era muy grande, tenía las orejas marrones y las patitas blancas. Yo me lo encontré por el pantano una mañana de invierno. Estaba en plena carretera y me miró como diciéndome: “cógeme”. No le hice caso, pero a la vuelta seguía en el mismo sitio; yo ni corta ni perezosa lo subí al coche y el tan contento. Lo puse en la bandeja de atrás pero el se fue acercando y colocó sus patas sobres mis hombros asomando su cara por la ventana. En principio no fue bien recibido en casa (recordábamos a Canelo), pero después nos lo quedamos. Lucero era muy tranquilo y dormilón (tenía a quien parecerse); era sobre todo un perro bueno y simpático. Por las noches, cuando mamá, Mamina y yo nos poníamos a ver la tele el se sentaba al lado de nuestra abuela (Mamina) esperando que esta se levantara y acostara; entonces Lucero pegaba un saltito y se sentaba en el sillón. Durante el día solía dormir mucho. Fueron varios años que disfrutamos de su compañía hasta que marchó al “universo de las estrellas de los animales”.

“Wellcome” (Bienvenido). Tenía mezcla de perro galgo con el cuerpo lleno de irisaciones y grandes patas. Me lo entregaron unos antiguos alumnos que junto a un grupo de maestros del colegio San Bernardo de Algeciras fuimos una tarde a la garganta del capitán para pasar el día. El perro estuvo todo el día con nosotros, bebió agua, café, coca cola y comió todo lo que le dábamos. Al final del día me vi con el perro en brazos y subiéndolo a mi casa donde estuvo conmigo más de un mes. Era muy nervioso y algo agresivo, también juguetón. Yo, algunas noches lo disfrazaba y el tan tranquilo. Me lo traje para Ceuta en el barco e incluso se mareo. Al principio mi familia se lo quedó, pero después decidimos que era un perro para estar en el campo y se lo entregamos a un señor musulmán que se lo llevó cerca de Castillejos con él. En cierta ocasión mi madre y yo fuimos a verlo, pero en el camino unos “mejasnis” nos apuntaron con el rifle; yo hablé en francés con ellos y no paso nada. A Wellcome lo encontramos con un pedazo de cadena atado, pero se quedó con el señor musulmán. Nunca más supimos de él.

El mismo día 21 de julio, representantes voluntarios de la asociación protectora de plantas y animales de Ceuta giraron una visita a la residencia Gerón con dos perros Pastor Alemán llamados, Luna y Dember que hicieron las delicias de los residentes. Fue una terapia muy bonita y muchos los acariciábamos con cariño. A Sandra López le comenté que mi madre socia fundadora de esta asociación hace 40 años junto a otras tres personas más.

Un cariñoso “guau” a los perros que han pasado por Gerón como Lala, Lexa, Balú y actualmente el pequeño de Odin.

P.D. Este artículo va en recuerdo a mi madre MARÍA LUISA LÓPEZ GUERRERO, fundadora de la Asociación Protectora de Plantas y Animales de Ceuta.