Cuatro detenidos y 1.200 kilos de droga interceptados. Este ha sido el resultado de una operación a cargo de agentes de la Policía Nacional que se ha saldado con el arresto de cuatro integrantes de una trama criminal dedicada, presuntamente, al tráfico internacional de hachís procedente de Marruecos.
La detención ocurrió justo en el momento en que se producía la entrega de la droga que tenían almacenada en una finca rústica ubicada en la sierra de Madrid y que iba a ser distribuida hacia Algeciras y la ciudad francesa de Lyon.
Como parte de la operación fueron interceptados casi 1.200 kilos de hachís dispuestos en un total de 30 fardos, además de dos armas semiautomáticas con munición, cuatro vehículos y un inhibidor de frecuencias.
De acuerdo con la información ofrecida por la Dirección General de la Policía, “la investigación se inició a raíz de una información que señalizaba la existencia de una finca rústica, ubicada en la provincia de Madrid, que estaría siendo utilizada por una organización como lugar de almacenamiento y ocultación de grandes cantidades de hachís, para su posterior distribución por parte de otros grupos delictivos a Algeciras y a la ciudad francesa de Lyon”.
Los datos apuntaban a que se iba a producir una entrega de estupefaciente “en una localización concreta que coincidiría con la de la mencionada finca rústica, y que a dicho lugar se desplazarían dos vehículos para su transporte”.
Valiéndose de esta información, los investigadores lograron establecer un dispositivo policial “y observaron los movimientos realizados por diferentes vehículos y sus ocupantes en el punto de encuentro y las inmediaciones”.
Adicionalmente pudieron constatar “que los vehículos regresaban hasta el punto de encuentro, aparentemente tras haber cargado el estupefaciente para su entrega a los conductores que les esperaban”.
Fue en ese preciso momento que los agentes interceptaron a los investigados, procediendo de inmediato a la detención de cuatro de los integrantes del entramado criminal.
“Al comprobar el interior de los vehículos, los agentes encontraron un total de 24 fardos de hachís y un arma de fuego municionada”, han revelado las autoridades.
Como parte de la operación también fueron intervenidos otros dos vehículos “que habían llegado hasta allí para, supuestamente, hacer de lanzadera y dar seguridad al transporte del estupefaciente dirección Francia”.
Asimismo, en la finca que utilizaban de guardería para la droga, “se llevó a cabo una requisa del inmueble localizando en su interior seis fardos más de hachís de las mismas características, una pistola semiautomática preparada para ser usada, gran cantidad de munición y un inhibidor de frecuencias”.
Los agentes de la Policía Nacional “constataron que dos de los vehículos interceptados se encontraban sustraídos en Francia y Bélgica, portando placas de matrícula que no corresponden con los números de bastidor, por lo que a través de las autoridades francesas e INTERPOL se han realizado las gestiones para comunicar la recuperación de los mismos. Los cuatro detenidos han ingresado en prisión”.