Los agentes del servicio de prefectura de la Policía Judicial de Tánger detuvieron, sobre la base de informaciones precisas proporcionadas por los servicios de la Dirección General de la Vigilancia del Territorio (DGST), al menos a cinco individuos sospechosos de estar implicados en casos de extorsión sexual en Marruecos. El principal sospechoso, un reincidente implicado en casos de extorsión y que es objeto de aviso de búsqueda nacional por extorsión sexual, fue detenido, indicó la Dirección General de Seguridad Nacional (DGSN) en un comunicado de prensa, y añadió que otros cuatro cómplices en la comisión de estos actos delictivos fueron detenidos en un piso que alquilaban en Tánger. Los registros permitieron la incautación de equipos electrónicos y teléfonos móviles, utilizados para grabar vídeos a sus víctimas en situaciones comprometedoras con el fin de estafarlas posteriormente, precisó la misma fuente, señalando que los arrestados tenían en su posesión trozos de hachís sospechosos de estar destinados al consumo. Los sospechosos fueron puestos en prisión preventiva para ser investigados bajo la supervisión de la fiscalía competente, con el fin de esclarecer las circunstancias de este caso y determinar todos los actos delictivos de los que se les acusa, concluyó la DGSN.
Las falsas prostitutas que cayó en 2019
Aunque no ha trascendido a través de cauces oficial el método que presuntamente empleaba este grupo, la sextorsión o extorsión sexual es una forma de explotación sexual, en la cual una persona es inducida o chantajeada —generalmente por aplicaciones de mensajería por Internet— con una imagen o vídeo de sí misma desnuda o realizando actos sexuales, mediante sexting. En los últimos años han salido a la pública otros casos similares en Marruecos,
como es el caso de la banda de falsas prostitutas que se especializó en esta actividad delictiva y cayó en 2019. Cuando llevaban a un cliente a un apartamento, sus cómplices irrumpían violentamente, lo grababan en situaciones comprometedoras, lo mantenían retenido y le exigían importantes sumas de dinero a cambio del silencio.