El pasado 23 de enero sobre las 22:15 horas, un agente que prestaba servicio de vigilancia en la Jefatura de la Policía Local, fue requerido por una ciudadana que manifestaba que instantes antes en la Avenida Teniente Coronel Gautier, su hijo menor de edad que se encontraba jugando en la calle, había sido victima del robo de un teléfono móvil y que el presunto autor de los hechos le había propinado varias bofetadas para arrebatárselo, facilitando datos de las características físicas del individuo, así como del apodo por el que le conocen. El funcionario, trasladó a través de su centro de comunicaciones los hechos narrados por la denunciante. "Se montó un dispositivo para localizar al presunto autor, ya que por la descripción facilitada, eran conocedores de que el individuo que buscaban es un delincuente habitual con problemas de drogadicción y que ha protagonizado varios actos delictivos", explican desde la Policía Local a través de una nota de prensa.
Minutos más tarde, localizan al susodicho en la barriada Príncipe Felipe, con heridas sangrantes en el rostro. Una vez identificado y cacheado, les pregunta a los agentes: “¿Esto que es, por lo del móvil?”.
Ante los hechos descritos anteriormente, fue informado por los agentes actuantes de sus derechos y razones de su detención, siendo trasladado en primer lugar al ambulatorio José Lafont para ser asistido de la lesiones que presentaba, practicando posteriormente diligencias en Cuerpo Nacional de Policía. El menor fue trasladado por su madre al Hospital Universitario, ya que refería tener dolor de oídos e inflamación, personándose posteriormente en Comisaría para la pertinente denuncia.