La Policía Nacional arrestó el pasado martes en Palma a un hombre de origen marroquí de 44 años de edad sobre el que pesaba una orden internacional de busca y captura por las autoridades de Marruecos al considerarle el líder de una red dedicada al tráfico internacional de coches robado que eran pasados por la frontera del Tarajal.
Además, el sospechoso tiene pendiente el cumplimiento de una condena de diez años de cárcel, que fue dictada por un tribunal de Tetuán en marzo de 2001 por introducir de forma ilegal en Marruecos vehículos sustraídos en Italia, tal y como ha publicado el Diario de Palma. El hombre alegó que desconocía que había sido sentenciado en Marruecos, ya que vive fuera de su país desde hace veinte años. También señaló que reside en Mallorca desde hace una década, donde ha trabajado en el sector de la hostelería y la restauración. Tras su puesta a disposición del juzgado central de instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, a través de videoconferencia, el magistrado ordenó su ingreso en prisión provisional. Contra él se interpuso denuncia por parte de un italiano que fue detenido en el paso del Tarajal con un coche robado. Le señaló como el dirigente de la organización que le había facilitado el vehículo que solo tenía que hacer pasar por este cruce fronterizo.