Unos setecientos cincuenta mil euros se han previsto en las cuentas públicas del próximo ejercicio para el comienzo de los trabajos de varios viales que figuran en el Plan de Inversiones de la Ciudad Autónoma. Nos referimos en concreto a la conexión San José-Sardinero a través del Arroyo Paneque, Recinto-Calle Real po
r el Molino y Cebollino-Azcárate. Para el primero de estos proyectos se ha previsto trescientos mil euros, ciento cincuenta mil para el de Recinto-Calle Real y doscientos mil para el de Cebollino-Azcárate.
La actuación más importante es la conexión entre la Barriada San José con el Sardinero. Un proyecto que ya figuraba entre las prioridades del gobierno hace años, pero que se tuvo que aparcar por dos razones primordiales, por un lado, el inicio de la crisis económica que obligó a paralizar todas las inversiones que el ejecutivo tenía previstas y, luego, la solución a la Plaza Nicaragua, bastante compleja, que está íntimamente ligada a la obra del Arroyo Paneque, no en vano, se encuentra en la cabecera de ese nuevo vial que se quiere construir.
Ello permitiría, desde luego, encontrar una nueva salida de conexión que vendría a ayudar a las que ahora mismo existen para el tráfico, como las de la Avenida de Lisboa y la Avenida Ejército Español, además de la Avenida Nuestra Señora de Otero y la Avenida de Africa.
Junto a estas inversiones nos encontramos, por otro lado, con esas nuevas conexiones del Recinto con la Calle Real. Las de Cebollino y Azcárate y Recinto-Calle Real suponen, en realidad, una de las situaciones de mayor necesidad, no en vano, existen muy pocas bajadas desde la zona alta del centro, salvo las de la calle Sevilla v la del Pasaje Recreo.
En definitiva, es recuperar la política de inversiones en construcción de nuevos viales que estuvo ejecutando el equipo de gobierno durante toda la década anterior y que vino con la creación de nuevas calles y la reforma de otras vías que ya existían.
Se apuesta por recuperar la política de mejorar todas las conexiones viarias
En los primeros años del mandato del presidente Vivas, una de las prioridades que se marcó el ejecutivo fue la construcción de nuevos viales que mejoraron las conexiones viarias entre distintas calles de nuestra ciudad y junto a ello vino la reforma de otras vías principales.
Así, por ejemplo, contamos con el vial de Vicedo Martínez o la colaboración por parte de la Ciudad junto a la Administración General del Estado, a través del SEPES, para la urbanización de Loma Colmenar.
Fue un trabajo conjunto entre las dos administraciones, tanto la autonómica como la central, que permiten, en estos momentos, un conjunto de nuevas carreteras que circundan la barriada del Príncipe Alfonso.
Pero junto a esa política nos encontramos también con esa reforma de calles principales, como, por ejemplo, la Avenida de Africa o la Avenida de España, con una importancia clave en la unión entre el casco urbano con las barriadas a partir de las Puertas del Campo.
Actualizaciones
Unas actualizaciones que supusieron, en líneas generales, la construcción de una mediana para separar los carriles de una u otra dirección, así como la mejora en distintos apartados como la iluminación, así como el firme.
Asimismo se encuentra la Avenida de Lisboa y otras calles de menor afluencia de vehículos, pero que se consideraban claves en una mayor rapidez para los traslados de un lado a otro de nuestra ciudad.