Una de las preguntas más recurrentes en las asambleas de empresarios que los polígonos del Tarajal celebran desde hace semanas ha sido sobre el futuro del Biutz. El paso de mercancías permanece clausurado desde la entrada en funcionamiento del ‘Tarajal II’ el pasado 27 de febrero sin que las autoridades se hayan pronunciado sobre el destino de esta ‘puerta’ horadada en el perímetro fronterizo. Los comerciantes de Alborán defienden que las autoridades competentes, entienden que la Delegación del Gobierno, tienen que desmantelar la infraestructura ya que su retirada permitirá la recuperación de espacio en los viales de los polígonos.
Los últimos metros que anteceden a la bajada que desemboca en los tornos del Biutz están protegidos por un vallado que asemeja el trayecto a una jaula. Estos barrotes, afianzados al suelo, ocupan parte del carril concebido para la circulación de vehículos. La intención, al menos en Alborán, conlleva su desmontaje para ganar anchura a los viales, ampliar el espacio disponible y desahogar el tráfico rodado en el recinto –dentro del horario habilitado para ello–.
Sobre el vallado se sostiene el techado que protege la ‘boca’ del Biutz de las inclemencias del tiempo, de modo que de materializarse la propuesta de los comerciantes, habría que eliminar también esa cubierta. Los empresarios reflexionaron acerca de la necesidad de mantener la infraestructura tal y como estaba antes de su cierre. El colectivo interpeló sobre la pertinencia de conservar una estructura que, a priori, nunca más se dedicará al tránsito de mercancías de Ceuta a Marruecos ante la activación del ‘Tarajal II’.
Cuando el puente del Biutz estaba a punto de cumplir su duodécimo aniversario, España anunció su cierre por la puesta en marcha del nuevo paso de mercancías. Un puñado de metros que conectaron Ceuta y Marruecos durante una docena de años y cuyos tornos hicieron girar miles de bultos en ese tiempo.
El coste de la habilitación del Biutz, por parte de la Delegación del Gobierno, ascendió a 600.000 euros, que contó con el cerramiento de todo el polígono por valor de 300.000 euros a cargo de la Ciudad Autónoma.
El Gobierno de la Plaza de los Reyes mantuvo una intensa negociación con las autoridades marroquíes a fin de poder abrir el antiguo puente hasta que la obra pudo iniciarse. Los trabajos se prolongaron durante 14 meses con la colaboración del Gobierno autonómico y de los empresarios. Los estamentos implicados mantuvieron una serie de reuniones de coordinación hasta que el proyecto se convirtió en realidad.
En el acceso al terreno de jomasa
Sustituir las señales de prohibido el paso por otras de limitación horaria
Mohamed Ahmed, portavoz de la Comunidad de Propietarios de los Polígonos del Tarajal, solicitó ayer a la institución que corresponda –interpreta que la Ciudad Autónoma– que sustituya las dos señales verticales de prohibido el paso en la entrada al terreno de Jomasa por otras que informen acerca de la posibilidad de circular a partir de las 13.00 o 13.30 horas.
Ante la llegada del verano, y en previsión del aumento de turistas que acudan en coche a los polígonos aprovechando sus vacaciones, el también presidente de La Chimenea explicó que estos círculos confundirán a los clientes a riesgo de perder las ventas.
Ahmed abogó por reemplazar estas señalizaciones por otras de limitación horaria a fin de evitar que los compradores se pierdan en su búsqueda de una entrada a las naves como, lamentó, ya ha ocurrido.
El colectivo considera fundamental la captación de esta clientela que visita periódicamente sus almacenes.
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