Un auténtico desastre. Una falta clara de atención a las necesidades que tiene la
Guardia Civil. Es lo que piensa
AEGC después de conocerse la oferta de plazas y comprobar que solo han sido 2.500 las publicadas. Algo que dejará el número de efectivos del Cuerpo en cifras de 2013, afectando gravemente a territorios como el de Ceuta y
Melilla.
“Este refuerzo queda aún muy lejos de las necesidades de personal de la Benemérita”, apunta la asociación. AEGC lleva años denunciando las consecuencias que esta falta de efectivos ocasiona en la Institución desde la crisis de la primera década del 2000 en la que se congeló la oferta de empleo público y durante años las bajas por pase a la reserva o jubilación no se repusieron. “Un déficit de personal que se traduce, por poner solo unos ejemplos, en que en los puntos más calientes con problemas de narcotráfico o inmigración ilegal como son Ceuta, Melilla, Gibraltar o Canarias dependen de sus servicios del personal itinerante que llega de otras comunidades, a las que, por cierto, se deja aún más desprotegidas al privarlas de los agentes destinados en ellas”, reprocha. “Porque hablamos de la España Vaciada en la que en pleno siglo XXI siguen en pie puestos de la Guardia Civil con menos de 10 agentes que a duras penas pueden abrir puertas de 8 a 14 horas, como si los delincuentes ficharan y solo delinquieran en horario de oficina”, añade. Estos 2.500 nuevos efectivos que se ofertan hoy siguen siendo pocos para dar solución al problema que tienen también muchas de las especialidades, como en la Agrupación de Tráfico donde deberían estar destinados 10.600 agentes aunque la realidad es que tan solo cuentan con 8.627. Para AEGC volver al número de efectivos de antes de 2008 supondría que los ciudadanos tendrían un mejor servicio, “los guardias civiles no tendríamos que paliar las deficiencias de personal con sobreesfuerzos día tras día y disfrutaríamos de trabajo que concilien nuestra vida profesional con la familiar, como sí tienen otros cuerpos policiales”. AEGC, a pesar de considerar positiva la vuelta de promociones grandes, sigue exigiendo al Gobierno que lleve a cabo el esfuerzo necesario para recuperar, al menos, las cifras de personal de principios de este siglo y que las complete con un nuevo despliegue territorial para que se dé un servicio de calidad.