Desarticulada una organización de pase de hachís en motos de agua

{jaimage crop="BC" /}Doce personas detenidas, 422 kilos de hachís aprehendidos, motos náuticas y dinero. Este es el  saldo de la bautizada como ‘Operación Center’ llevada a cabo por la Guardia Civil y con la que se ha eliminado una organización que se dedicaba al tráfico de hachís en motos de agua. La organización disponía de infraestructura en Marruecos y Ceuta, destinando el hachís a la península a través de la costa occidental de la provincia de Málaga. La red contaba además con miembros que sustraían partidas de droga para obtener beneficios absolutos, ya que traficaban con mercancía que no les había causado coste alguno y con su tráfico y distribución lograban un doble beneficio.
En el transcurso del operativo se ha procedido al desarrollo de registros en distintos puntos de Málaga y Ceuta, aunque las detenciones se han llevado a cabo íntegramente en la península, al igual que el decomiso del hachís y el bloqueo de los distintos vehículos que se usaban para el tráfico de la mercancía.
Tal y como informa el Instituto Armado, la operación se inició el pasado mes de agosto, cuando se detectó la existencia de un grupo de personas que se dedicaba a la introducción de importantes cantidades de hachís en España por vía marítima.
Tras las primeras investigaciones se pudo averiguar que este grupo contaba con infraestructura en el norte de Marruecos y en Ceuta, donde estaban los encargados de adquirir el hachís, gestionar los medios de transporte, captar a los pilotos de las embarcaciones y organizar la salida de la mercancía hacia la península. En la provincia de Málaga se encontraba el intermediario entre la red y los clientes finales que se quedaban, previo pago, con el hachís.
El modus operandi no variaba. La droga en motos de agua partía siempre desde las cercanas playas de Restinga, hasta allí se desplazaba el piloto de la moto “acompañado siempre del hombre de confianza de los clientes, dado que los destinatarios de la mercancía pagaban parte de la misma antes de iniciarse su transporte”, explica la Guardia Civil.
El operativo comenzó con la detención de una pareja en Mijas, la aprehensión de 120 kilos de hachís y la incautación de la moto. Pero este servicio significaba algo más, ya que pronto se convirtió en el punto para seguir tirando del hilo y llegar al resto de implicados. Así hasta diez personas más.
En el mes de octubre y nuevamente en las playas del término municipal de Mijas, se practicaron otras tres detenciones y se aprehendió otra moto náutica y 180 kilos de hachís. En la playa del Velerín de la localidad malagueña de Estepona se practicaron las detenciones de otras tres personas, la aprehensión de una moto náutica, un vehículo otros 120 kilogramos de hachís.
La operación culminó con registros domiciliarios en Ceuta y en diferentes localidades de la Costa del Sol, practicándose dos nuevas detenciones en la península, aprehendiéndose más de 20.000 euros en efectivo, 2 kilos de hachís, 6 kilogramos de marihuana, útiles para la manipulación y pesaje de la droga, documentación incriminatoria, dos vehículos y una motocicleta. La investigación, dirigida por el Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola (Málaga), ha sido desarrollada por el  Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Málaga, contando con el apoyo de las Unidades territoriales afectadas. Del total de los doce detenidos, nueve han ingresado en prisión, quedando en libertad con cargos el resto, habiéndose dictado orden de búsqueda y detención contra otros cuatro integrantes del grupo.

Narcos que roban a narcos y ganan más dinero

La investigación desarrollada por la Benemérita ha puesto de manifiesto que se producían engaños entre los propios narcotraficantes, es decir, entre los pasadores integrantes de esta red y otros dueños de la mercancía. ¿Por qué? Porque entre ellos mismos se atacaban llevando a cabo robos. La Benemérita informa de que “cada vez es más común en el mundo del narcotráfico” ese tipo de robos, pero en esta ocasión “llamó especialmente la atención por el plan urdido por las personas encargadas de gestionar desde Ceuta la preparación del alijo y su transporte a la península”, indican. Así, tras robar parte del alijo, era repartido a partes iguales entre los que habían participado en el engaño, encargándose de darle salida y obteniendo beneficios directos. La droga se encontraba escondida, por lo que los investigados controlaban y captaban a otras “mulas”, que introducían el hachís desde Marruecos a Ceuta en pequeñas partidas, y posteriormente de Ceuta hasta Algeciras, donde la vendían a diferentes clientes. Por estos hechos, paralelos pero también vinculados al funcionamiento de la organización, fueron detenidas dos personas en Algeciras, las cuales habían realizado la operación descrita anteriormente y se disponían a “pasar” un kilo y medio de hachís. La droga se localizó adosada a la cintura de uno de los detenidos que actuaba como “mula”.

Intenta pasar droga simulando ser electricista

C. E. CEUTA
No se le ocurrió otra cosa que disfrazarse de electricista para ocultar la labor a la que realmente se dedicaba: pasar hachís. Así hasta que la Brigada Móvil-Policía en el Transporte de la Comisaría de Algeciras pudo dar al traste con su estrategia comprobando los hechos y procediendo a la detención del llamado D.S.R., de 37 años.
En un comunicado, la Policía ha explicado que “a pesar de tener bien preparada su coartada con apariencia de electricista, daba respuestas incoherentes y dubitativas a los agentes, para reconocer finalmente su propósito delictivo. Tras lo cual fue sometido a pruebas radiológicas consentidas para asegurar su integridad física en las que se detectaría la presencia de cuerpos extraños, al parecer hachís”.
El falso electricista llevaba oculta cierta cantidad de bellotas y había pasado de Ceuta a Algeciras como si fuera trabajador que presta servicios en la ciudad. Su caso no es el único. En los últimos meses parece que elegir profesiones falsas es la estrategia que gusta más a los pequeños pasadores de hachís. Tal es así que al electricista de marras se le suman otros como pintores, trabajadores de la construcción, miembros de oenegés o albañiles que se dedican al pase de hachís encubierto.
El detenido y efectos intervenidos fueron puestos a disposición de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) del Cuerpo Nacional de Policía, que continúa las diligencias tendentes al total esclarecimiento de los hechos y la puesta a disposición judicial del detenido.
Los controles policiales para detectar casos así se llevan a cabo por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado tanto en el puerto de Ceuta como en el de Algeciras.