Categorías: Opinión

Desagraviando a España

Hoy se celebra, en Valladolid, el acto central del Día de las Fuerzas Armadas. Como imponen los duros tiempos que vivimos, la jornada se verá afectada por el inevitable recorte en los gastos. Nada menos que un 85% de disminución con respecto a los ya rebajados del pasado año.
Me consta que nuestros sufridos Ejércitos están ya más que acostumbrados a la reducción de tropas y a las restricciones presupuestarias. De entre todos los países de la Unión Europea, y de entre todos los que integran la OTAN, España es, con mucho, el que proporcionalmente dedica menos fondos a sus necesidades de defensa. Y, encima, todavía hay quienes, desde la izquierda radical, se empeñan en pregonar que consideran ese gasto como algo superfluo y, por tanto, prescindible. Les incomoda y molesta sobremanera la mera existencia de las Fuerzas Armadas, y les resbala, porque prefieren ignorarla, la misión que el artículo 8 de la Constitución  encomienda a los Ejércitos: “garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el orden constitucional”.
Sin ir más lejos, Ceuta es un claro espejo de las sucesivas reducciones impuestas a las Fuerzas Armadas de España. Situada en el flanco sur, siempre supo vivir en una verdadera simbiosis con el Ejército de Tierra. Lo militar ha sido una constante vital para esta ciudad, tanto desde una perspectiva anímica como desde otra, más material, la de la economía. Las ventajas que ello suponía superaban, con mucho, a los inconvenientes que tal presencia masiva pudiera ocasionar. Hoy solo quedan restos de aquel pasado. Y eso que, como antes dije, estamos en el flanco sur, la zona más delicada, según todos los expertos, para la tarea constitucional de defender la integridad territorial de España. No olvido mi visita, en calidad de Secretario Primero de la Comisión de Defensa del Congreso, a un centro de altos estudios de las Fuerzas Armadas, en el que me sorprendió gratamente encontrar una gran maqueta de esta ciudad, sobre la cual debatían jefes y oficiales acerca de la mejor forma de defendernos.
Pero mi propósito, al escribir estas líneas, era –y sigue siendo- el de referirme a la emocionante ceremonia del arriado de la bandera nacional que tuvo lugar el pasado jueves en el Parque Urbano Juan Carlos I. Sin haberse anunciado como tal, los ceutíes se percataron de que era una magnífica oportunidad para dar testimonio de su repulsa ante la repugnante ofensa que sufrió nuestra Patria –y la de ellos, aunque no les guste- por parte de aficionados del Barça y del Athletic en la final de la Copa del Rey. Sin existir –repito- una convocatoria explícita para tal fin, en torno a mil quinientas personas se reunieron allí para demostrar su amor por los símbolos de España y, así, desagraviarla de tan rastrera pitada, producto, sin duda, de la tendenciosa educación  en el odio a todo lo español que, desde hace ya treinta años, y basada en una burda manipulación de la historia,  vienen recibiendo los alumnos catalanes y vascos, gracias a unos Estatutos de Autonomía que me precio de no haber votado desde mi escaño de Diputado por Ceuta, allá por los inicios de los años 80.
No me gustaban, presentía que podían portar un germen peligroso para la unidad de España (algo que otros no supieron o no quisieron ver), y por esa razón, en uso de mi libertad personal, opté por saltarme la disciplina de mi grupo parlamentario, como ha de constar en los registros de votación. Creo fundadamente que el tiempo, y los hechos, han venido a darme la razón.  Como español, bien que lo siento.
El pasado jueves, día  31  de  mayo  de  2012,  en  una España acosada por los separatismos (además de por la crisis económica) los ceutíes volvieron a demostrar su acendrado amor a la Patria.  Seremos menos que los ofensores, pero no me cabe duda de que valemos muchísimo más que ellos.

Entradas recientes

Juegos Olímpicos de París: Francia cuenta con Marruecos para la seguridad

Las autoridades francesas decidieron contar con la ayuda de la seguridad marroquí para protegerse de…

18/07/2024

Andy y Lucas llenan las Murallas Reales veinte años después

Veinte años son muchos años. Ese el tiempo que ha pasado desde que Andy y…

18/07/2024

Guerra a las sillas, mesas y sombrillas de playa con numerosos decomisos en Tánger

Las autoridades de Tánger ha lanzado una campaña de 'barrido' en las playas de la…

18/07/2024

Una 'influencer' ceutí defiende el uso del burkini

La 'influencer' de Ceuta Kauzar Mribet Abdeselam, española de tercera generación y de origen marroquí, ha…

18/07/2024

Sergio Llorca inicia una travesía en Lisboa con la embarcación Ceuta

El patrón sevillano Sergio Llorca, al mando de la embarcación ‘Ceuta’, soltó amarras este jueves…

18/07/2024

Así se prepara la iglesia de África para los días grandes de la Patrona

A tan solo unos días del inicio de la Novena de la Virgen de África…

18/07/2024