La Asociación de Síndrome de Down de Ceuta denuncia un posible trato discriminatorio de uno de sus usuarios en su centro educativo. Según han dado a conocer, el menor estaba interesado en participar junto a sus compañeros en el viaje de estudios de fin de etapa que el colegio Santa María Micaela había organizado para ir a Londres.
Detallan su implicación, colaborando en todas las actividades que el centro promovió con la finalidad de recaudar dinero para los alumnos. Sin embargo y sin mayor explicación que un comportamiento “no adecuado”, la Comisión de Convivencia del colegio determinó para este alumno “la suspensión del derecho a participar en las actividades extraescolares o complementarias del centro, concretándose esto en la suspensión del derecho a participar en el viaje de estudios”.
Esa decisión fue comunicada a la familia el pasado lunes 1 de abril, poniéndolo también en conocimiento de la asociación, que junto a la familia no se explican qué pudo haber hecho el menor para recibir dicho dictamen que le impide participar de las actividades complementaria extraescolares.
La argumentación del centro educativo fue que en los últimos meses la conducta del alumno no había sido la adecuada, llegándole a imponer hasta dos partes. Esta situación, amparándose en las normas de convivencia y los deberes y derechos del alumnado, se contraviene con el derecho a participar en las actividades extraescolares.
La decisión del colegio ha sorprendido tanto a la familia como a la asociación, ya que aseguran que “ese mal comportamiento no se refleja en otros ámbitos”, preguntándose además cómo el centro no consideró como algo fuera de lo normal que un alumno de buen comportamiento tuviera este cambio de actitud repentino.
Después de la notificación, la familia del alumno ha pedido explicaciones mediante un escrito al colegio. De manera detallada se ha dirigido a la presidenta de la Comisión de Evaluación del colegio concertado Santa María Micaela, de donde es alumno el joven, para presentar las alegaciones pertinentes sobre la resolución adoptada.
Solicitan tanto el documento de la resolución acordada como la propuesta de llevar a cabo dicha decisión de que no viajase a Londres, “para así poder establecer el nexo de unión entra la tacha y la propuesta de resolución formulada”. También piden saber quién fue la persona que determinó esa actitud de “desconsideración” del alumno, así como los proponentes de esta resolución que ha dejado al alumnos sin opción a viajar.
En su escrito, la familia advierte que de no entregar toda la documentación requerida, estarían incurriendo en la “indefensión” del menor y estima que la decisión tomada “son contrarias a Derecho de lo que establece la Convención Internacional de las personas con Discapacidad”, así como la “posible vulneración de los derechos que como persona” le corresponden al alumno, principalmente del principio de igualdad.
Por su parte, la familia ya ha dado orden al Gabinete Jurídico correspondiente para que se inicie el procedimiento legal pertinente ante la Fiscalía y la Delegación del Gobierno, entre otros, para resolver lo que consideran “un detrimento de los Derechos Fundamentales” del alumno.