Un vecino de Ceuta ha presentado una queja este periódico tras recibir dos
multas consecutivas de la distintos agentes de la
Guardia Civil en la
frontera del Tarajal. Las dos, con solo 5 minutos de diferencia. Una entregada en mano y abonada y, la segunda, conocida por sorpresa cuando le llegó la notificación a su vivienda. Dice que de la misma se enteró por esta nota. El afectado ha puesto de manifiesto, multas en mano: 400 euros y 8 puntos de saldo, que la primera de las denuncias le fue interpuesta a las 8 y 5 minutos del pasado 3 de abril. Se le sancionó por circular “contraviniendo las restricciones temporales de la circulación impuestas”, recoge la multa que fue abonada por el perjudicado. Ahí terminó la historia. O al menos él pensó que lo haría, pero tiempo después ha recibido una notificación en su domicilio, con fecha del mismo día, que se corresponde con una multa por una infracción que, refleja, cometió solo cinco minutos más tarde, de la que el denunciante dice no tener conocimiento, ya que de hecho ni se la aportó la notificación. Esta segunda multa recoge que no habría respetado las señales de los agentes que regulan la circulación al darle la orden de que diera la vuelta ya que portaba mercancía y ya no era el horario establecido para hacerlo. Otros 200 euros y 4 puntos perdidos. Los expedientes de las dos sanciones son diferentes, firmadas por guardias distintos pero en el mismo tramo y con 5 minutos de diferencia, con la salvedad de que la primera sí se le entregó en mano y de la segunda se ha enterado al llegarle a su vivienda.