Mercedes Torres se queja por la espera tras llevar semiincosciente a su hermano y el Ingesa responde
La impresión que se llevó Mercedes Torres cuando entró en el servicio de Urgencia del HUCE, el pasado domingo por la noche, no pudo ser más tétrica: no había ningún médico en los boxes.
Acompañaba a su hermano, el cual iba en una silla de ruedas en estado de semiincosnciencia, después de que media hora antes había perdido el conocimiento en su domicilio y no respondía a los estímulos de sus familiares. Le dolía mucho la cabeza, “le iba a estallar”, nos apostilla Mercedes en el relato de los hechos.
La denuncia de Mercedes
Todo había comenzado alrededor de las 23.00 horas del domingo, cuando recibió una llamada de su cuñada indicándole que su hermano estaba muy mareado. Quedaron en que si empeoraba la volvería a telefonear. Diez minutos después quien está al otro lado del hilo telefónico es la madre de Mercedes, que había llegado al domicilio de su hijo y se lo había encontrado inconsciente en el suelo y sin responder a los estímulos. Le piden que vaya lo más rápido posible. Se da la circunstancia de que el hermano de Mercedes vive a escasos metros del hospital, en la promoción de las 170 VPO, pero no podían moverle, por lo que no les queda más remedio que solicitar la presencia de una ambulancia. A pesar de que telefonearon en varias ocasiones, ésta tardaba. De ahí que en cuanto Mercedes se plantó en la casa de su hermano comenzó a llamar a los vecinos para que acudieran y la ayudaran. Justo en ese instante apareció la ambulancia y les trasladó al servicio de Urgencias. Como decíamos al comienzo de esta información, cuando empujando a su hermano se personan en los boxes, no había ningún médico. Pasó más de un cuarto de hora sin que nadie compareciera a pesar de sus continuos llamamientos. Ya, como es lógico, viendo que pasaba el tiempo, comenzó a gritar desesperada solicitando atención. Entonces, llegó el vigilante de seguridad y la conminó a que abandonara las instalaciones hospitalarias, a lo que se negó en redondo. Por fin, apareció un facultativo que no era, desde luego, el que le habían asignado en el box 4 y le hizo una serie de pruebas a su hermano, decidiendo unas horas después darle el alta. Ante las quejas de Mercedes, debido a que no entendía este alta, dado los antecedentes que le había contado y sin que le hicieran ninguna prueba como un TAC ni ninguna otra prueba neurológica, la decisión “la toma porque indica que en la analítica todos los resultados aparecen como favorables”. Mercedes Torres se encuentra totalmente indignada con la atención recibida y señala que son muchos los casos del mismo tipo que se repiten, con demasiada frecuencia, en el servicio de Urgencias. En la mañana de ayer puso la correspondiente queja en el mismo hospital.
La versión del Ingesa
El Ingesa ha asegurado que el paciente fue atendido en triage a los 9 minutos de llegar al centro, y dos minutos después ya estaba siendo visto por el facultativo de guardia.
Además, ha negado que no hubiera médicos en el Servicio de Urgencias del Hospital Universitario, así como que se demorara más de un cuarto de hora su atención.