Ante la impotencia que he sentido y la chulería por parte de un miembro de la
Guardia Civil -indigno de vestir ese glorioso uniforme- y mi falta de reacción ante tal situación a la cual no estoy acostumbrado, inusual e inesperada, no me voy a quedar impasible porque personajes como este que se lucen de vestir un uniforme que no es de su talla. Gentuza lo llamaría yo, que tiran por tierra y desprestigian la labor de sus compañeros.
15:00 aproximadamente, en la zona de Bares de Benítez: aparcamiento reservado para discapacitados, llega un coche oficial de la Guardia Civil y aparca, no precisamente bien, ya que lo deja en oblicuo. Allí los presentes comentamos: "algo pasa... una urgencia". Pero no... el Señor Guardia se ve que la prisa que tenía era por ir a consumir a un bar cercano. A todo esto, entre tanto un Sr. conocido del lugar y discapacitado dando vueltas para buscar donde aparcar... Manda cojones, pero sigo.
Hora y pico después llega el Sr. agente con vaso de plástico en mano con "algo" en su interior, se introduce en el vehículo oficial, arranca y al pasar por mi vera le recrimino su aptitud: "Sr. eso no está bien, vd debería de dar ejemplo eso es una zona reservada a discapacitados". Y ahora viene lo mejor. "¿Qué me está amenazando? ¡Aquí está mi placa!", tirándose de ella con coraje como queriéndosela arrancársela del pecho. Arranca y se va... Me contesta: "Es Vd. de aquí?". A lo que le contesto "sí Sr. y Vd.?", cuando deberia de haberle contestado: "Y a Vd. qué le importa?" o también "¿Es una entrevista de trabajo?". Pues no, le conteste que sí que era de aquí. Respuesta del Sr. agente: "Pues ya nos veremos". Le dije "pues vale... yo también tengo su matrícula..."
¡Para qué! Tira para adelante y con todos sus santos cojones da la vuelta a la rotonda y vuelve para decirme: "¿Qué me está amenazando? ¡Aquí está mi placa!", tirándose de ella con coraje como queriéndosela arrancársela del pecho. Arranca y se va... Mi respuesta, absurda: "vale Sr., que tenga Vd. un buen día”.
Moraleja: No nos merecemos este trato por parte de energúmenos como este ejemplar y menos aun vistiendo ese digno uniforme. Si este Sr. me dijo que "ya nos veríamos" ahora tiene la ocasión de conocerme. Desde aquí le invito a que sea humilde, que lo mas fácil hubiese sido eso, reconocer y pedir disculpas y no chulerías baratas. No obstante aquí me tiene a su disposición el Glorioso Cuerpo de la Guardia Civil al cual tú no eres digno de pertenecer.
(Ante lo relatado hay testigos) Por Francis Valero