Su propietaria sospecha de una “persona del piso contiguo” y ahora se analiza la sustancia. María Muñoz, residente en la calle González de la Vega, ha denunciado ante el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) el envenenamiento de sus dos perros, de raza spiz alemán y ambos con microchip, causando la muerte de la hembra, Chispita, a pesar de que sus titulares la trasladaron a su veterinario. El macho, Gordo, también presentó síntomas y se recupera de forma gradual aunque, como figura en el historial de la mascota, aún presenta convulsiones parciales y requiere de medicación.
Los canes, aparece en el atestado del Instituto Armado, se encontraban la madrugada del jueves pasado en la terraza del domicilio de sus dueños. Los denunciantes sospechan que el autor de este delito penado incluso con cárcel, aunque al ser inferior a dos años no se cumple si no se tienen antecedentes, “es una persona del piso contiguo”.
En su declaración, Muñoz narró que intentaron intoxicar a sus perros con alguna sustancia mezclada con chocolate, que ella identificó con varias pastillas de paracetamol que encontró en sus vómitos. La propietaria, que solo quiere que se “haga justicia y la ley caiga sobre él”, relató que no había recibido quejas directas sobre sus mascotas, nunca había recibido ninguna amenaza. “Yo no quiero una indemnización, solo quiero que se haga justicia”, insistió.
Las diligencias añaden que, de acuerdo con las palabras de Muñoz, conmocionada por el suceso, no había sacado a los perros en los últimos días excepto en la madrugada del jueves “con correa corta y bajo vigilancia, no pudieron ingerir nada de la calle”.
Chispita y Gordo comenzaron a encontrarse mal hacia el mediodía del mismo día 27 ya que, cuando caminaban por la casa, se balanceaban o no querían andar. El machó vomitó unas once veces por la casa y en la azotea, expulsando una especie de pastillas que ha entregado al Seprona. Finalmente, Chispita murió el viernes.
Muñoz explicó que la Guardia Civil analiza en estos momentos la sustancia encontrada entre los restos de alimento expulsados por los perros que, en una dosis alta, puede provocar la muerte a un animal dado su tamaño, argumento su propietaria. Los guardias estuvieron en el inmueble realizando las indagaciones pertinentes. Muñoz también contactó con la Protectora de Animales.
Los achaques de la edad no le han nublado los cinco sentidos, como mínimo, no…
“No existen citas disponibles”. Es la frase que se leía en un llamativo rojo en…
Tal y como había sido anunciado, este jueves la Asociación de Carnavaleros de Ceuta (ACCE)…
La empresa china de fabricación de camiones Shacman y el grupo marroquí Premum han anunciado…
Ceuta ya conoce cuáles serán sus rivales de la Fase de Plata del Campeonato de…
Dice Delegación del Gobierno en Ceuta que se están resolviendo los problemas técnicos surgidos tras…