El pasado fin de semana los medios de comunicación se han hecho eco de la falta de profesionales en el servicio de urgencias. El enfoque de las informaciones ha sido bastante desafortunado por varios motivos que le vamos a detallar: Vaya por delante que estas situaciones se dan a pesar de la reiterada denuncia sobre la falta de personal que hacemos tanto CCOO como el resto de sindicatos.
Se ha difundido la conexión entre la fiesta del sacrificio y la ausencia de profesionales en sus puestos de trabajo. En cualquier fiesta, sea de la confesión que sea es responsabilidad de los directivos del INGESA la correcta cobertura de todos los turnos, es totalmente injusto además de erróneo achacar los problemas a una fiesta religiosa, en esta ocasión musulmana. Todos los trabajadores del hospital cumplen (como no puede ser de otra forma) escrupulosa y responsablemente con su trabajo. Cuando leemos una afirmación así nos viene a la cabeza la multitud de ocasiones en que los compañeros musulmanes han cubierto de favor a otros trabajadores en otras fiestas como por ejemplo las navideñas
Por otra parte se ha afirmado que el servicio de urgencias era el mas importante del hospital. Por supuesto que el servicio de urgencias es básico para el correcto funcionamiento del hospital pero no menos lo sería el quirófano, la hospitalización o el servicio de personal. En CCOO somos los primeros en denunciar carencias pero el hospital es un conjunto de servicios además del de urgencias y los profesionales son variados y no solamente médicos. De todas formas y centrándonos en el servicio de urgencias hospitalario tenemos que decir que quizá no estaríamos dándole vueltas a esta noticia, si el INGESA diese prioridad a la cobertura de personal tanto medico como del resto de categorías en lugar de haber recortado el horario de atención primaria o haber aumentado el número de sillones conociendo la falta acuciante de personal que sufre.
La carencia de personal es una realidad, en todas las categorías, en algunas porque el INGESA no cubre las vacantes forzando a muchos colectivos a trabajar bajo mínimos y en otras categorías porque hay un déficit generalizado de profesionales en todo el país.
El INGESA debe cubrir las vacantes que mantiene a costa del sobre esfuerzo del personal y de la atención al usuario. La cobertura de todas la categorías pasa inevitablemente por la convocatoria de oposiciones de forma periódica, además de sus procesos de traslado. La ausencia de dichos traslados provoca que los profesionales se vean obligados a mantenerse en comisión de servicio con el consiguiente riesgo de que el servicio de salud de origen se las deniegue y perdamos más efectivos aun. Y por otro lado es necesario una planificación de formación de profesionales a largo plazo que palíe de una vez estos déficits y que además prevea las masivas jubilaciones que se producirán en un futuro próximo.