El Cuerpo de Oficiales Legionarios

En 1918, se publicaba la Ley de Bases de Reorganización del Ejército por Real Decreto de nueve de junio de 1918 (Diario Oficial núm. 145).

El Cuerpo de Oficiales no existía en el Tercio de Extranjeros por lo que las clases de tropa debían ascender, primeramente bien por méritos de guerra o a criterio de su jefe de compañía a Suboficiales y posteriormente a Oficiales. Así se iba organizando la Escala Legionaria.

La circular de 4 de septiembre de 1920 (Diario Oficial núm. 199 de 5 de septiembre), dictaba las reglas de organización de la creación del Tercio de Extranjeros, indicando en su regla 20 que el personal de tropa podrá ascender por méritos de guerra y en tiempo de paz, con arreglo a las disposiciones vigentes, a todos los empleos de primera y segunda categoría y a oficiales del Tercio de Extranjeros, asimilados a los empleos de alférez y teniente del Ejército, figurando solamente en los cuadros del mismo, en la forma y con las reglas que en su día se determinen, sin que por este concepto puedan pasar a formar parte de las escalas de las Armas o Cuerpos del ejército, ni desempeñar otros destinos que los peculiares del Tercio.

"El capitán Karl Tiede Zeden, alistado al Tercio de Extranjeros el 27/06/1921 por un período de cinco años fue el primer legionario en llegar a comandante"

Se aprobaba un reglamento por circular de siete de febrero de 1924 (D.O. núm. 32 de ocho de febrero) donde se regían los ascensos por mérito de guerra y en paz del personal de tropa del Tercio de Extranjeros indicándose que los suboficiales del Tercio de Extranjeros podían ascender a oficiales figurando solo en los cuadros de dicho Tercio, y con mando de tropas en el mismo, sin que puedan formar parte de las escalas de las Armas o Cuerpos del Ejército ni desempeñar ningún otro destino.

La denominación de sus empleos seria de alférez de Tercio, teniente de Tercio y capitán de Tercio, asimilado respectivamente, a alférez, teniente y capitán del Ejército, siendo este último empleo el término de la carrera.

Por la necesidad de acomodar el reglamento que regulaba el ascenso de subtenientes y oficiales de Tercio con relación al personal de las Armas y Cuerpos del Ejército, se decidía por circular de 16 de diciembre de 1935 (DOMG núm. 295 de 24 de diciembre) dejar sin efecto lo publicado en 1924 (DOMG núm. 32) adoptándose que como máximo, habrá tantos subalternos como compañías tenga organizadas el Tercio, y tantos capitanes, como Banderas.

Para poder ascender tendrán que realizar un examen de materias y con ocasión de vacante, alcanzarían el empleo a optar. Para los ascensos que no sean por méritos de guerra, será condición indispensable en los subtenientes, el llevar dos años de servicio como mínimo; en los alféreces de Tercio, cuatro años en este empleo y en los tenientes de Tercio, ocho años en el mismo.

En este año, 1936, se produce una situación convulsa en España con el inicio de una guerra civil, debido a la situación del país, lo que llevaría consigo un cambio de situación dada en el ascenso a oficial.

Así por Decreto núm.129 de 25 de septiembre de 1936 (B.O. de la J.D.N. núm. 30) se concedía el empleo de alférez, con los derechos, consideraciones y prerrogativas a él correspondientes, a todos los Subtenientes del Tercio que sean necesarios para cubrir sus plantillas vigentes.

El Decreto número 156 de cuatro de enero de 1937 (Boletín Oficial del Estado núm. 80 de 8 de enero), disponía que los capitanes procedentes del Tercio de Extranjeros por los servicios prestados a la Nación, por su capacidad para el mando, por las virtudes demostradas y los méritos de campaña fueran considerados merecedores de ascenso, podrían obtener el empleo de Jefe, si comprobados sus méritos y aptitudes eran dignos de alcanzar dicho empleo.

En aplicación del anterior Decreto, y teniéndose en cuenta el tiempo servido en el Tercio de Extranjeros y su conducta, era ascendido al empleo de comandante (Decreto 157), el capitán Karl Tiede Zeden, alistado al Tercio de Extranjeros el veintisiete de junio de 1921 por un período de cinco años. PRIMER LEGIONARIO EN LLEGAR A COMANDANTE.

"Con el paso del tiempo se creaba la Academia de Formación de Mandos Legionarios (A.F.M.L.)"

Así por orden de 13 de diciembre de 1937 (Boletín Oficial del Estado núm. 420) se disponía que los actuales alféreces legionarios eran promovidos al empleo de tenientes de La Legión, con antigüedad de la fecha en que cumplieran el año de alférez.

Esta misma orden, disponía que suprimida en La Legión la categoría de subteniente por aplicación de la ley de 5 de diciembre de 1935, se confería a este personal el empleo de alférez legionario, con antigüedad de 1 de abril de 1939, y ascendidos automáticamente a teniente de La Legión con antigüedad de 1 de abril de 1940.

Así pues, se publicaba el Reglamento del Cuerpo de Oficiales de la Legión por circular de 3 de octubre de 1945 (Diario Oficial núm. 223 de 5 de octubre), dejando sin efecto el publicado anteriormente en 1935 (Diario Oficial núm. 299). Por esta ley se organizaba una Academia por cada Tercio existente (tres) y otra en el acuartelamiento de Riffien.

"Poco tiempo después con la Instrucción General 30/1990 desaparecería la Escala Legionaria"

Este Reglamento sufriría una modificación por Orden de 12 de agosto de 1947 (Diario Oficial núm. 181), en el sentido que el empleo del brigada legionario podía ingresar en el Cuerpo de Oficiales legionarios.

Con el paso del tiempo se creaba la Academia de Formación de Mandos Legionarios (A.F.M.L.) por la Instrucción General 13/81 (1ª División) de 6 de octubre de 1981 para la preparación de los futuros Oficiales legionarios que exigía el Reglamento del Cuerpo de Oficiales legionarios. En ella, se realizaría el curso de promoción para el ascenso a teniente legionario, iniciando su andadura oficialmente en el curso académico del año 1983.La idea, impulsada por el entonces General Subinspector de La Legión D. Tomas Pallas Sierra, contaba con el apoyo del Ministro de Defensa Oliart Saussol y del Jefe del Estado Mayor del Ejército, general Gabeiras Montero, decidiéndose que dicha Academia tuviera dependencia directa de este último.

"El Cuerpo de Oficiales no existía en el Tercio de Extranjero"

Por Orden de la Subinspección de La Legión, de 16 de febrero de 1982, la Academia recibía la denominación “Comandante Tiede” como homenaje al primer legionario que alcanzo el empleo de comandante, Carlos (Karl) Tiede Zeden, adoptando el antiguo Guión de la XIª Bandera y más tarde en cumplimiento de Norma General 3/90 del Estado Mayor del Ejército (E.M.E.), se llevaba a cabo la disolución de la misma.

Poco tiempo después con la Instrucción General 30/1990 desaparecería la Escala Legionaria.

Por Real Decreto 1982/1991 de 20 de diciembre, por la que se adaptarían todas las Escalas existentes por la Ley 17/89, se extinguiría la Escala legionaria de Jefes y Oficiales de Infantería en los empleos de teniente, capitán y comandante, integrándose en la Escala Media aquel que lo deseara. Quien no se hubiera integrado, esperaría hasta su fecha de pase a la reserva activa.

Además del comandante Tiede Zeden, figurarían en el escalafón de los que alcanzaron el empleo de comandante, D. Luis María Crespo de Guzmán, D. Domingo Piris Berrocal (único que alcanzaría el empleo de teniente coronel) y D. Francisco Canós Fenollosa.

Pequeña historia del recorrido del Oficial legionario desde su alistamiento.