Una familia de Ceuta ha sufrido este domingo un doble trance: el de la pérdida repentina de un ser querido pero, además, el de la “falta de humanidad” de quienes tenían que decretar su muerte y han alargado esta gestión durante horas. Más de cuatro para ser exactos, entre las 13.00 y las 17.15 aproximadamente, ha estado el cadáver tendido en el suelo de un garaje hasta que han podido proceder a su levantamiento. Los parientes del difunto han hecho un llamamiento para que su historia no se vuelva a repetir, que este trámite no se demore tanto ya que, mientras que el servicio de emergencias 061 y la médico forense se ponían de acuerdo en quién tenía que certificar la muerte, había una familia llorando esa pena tan inesperada. Un muerte sobrevenida que, apuntan, sus parientes, ha sido por motivos naturales. Según relata el entorno del fallecido, teóricamente el
061 tenía que haber decretado la defunción, sin embargo, no lo hizo. Ha sido la
médico forense quien ha localizado a otro facultativo que se ha encargado de cumplimentar este trámite siguiendo sus instrucciones.
En los comienzos de este desagradable episodio, el equipo del 061 solicitó una serie de informes médicos para cumplir con el protocolo de defunción. Sin embargo, pese a que se obtuvieron, la familia sostiene que no se quisieron responsabilizar de la situación. Un servicio de la Policía Nacional, presente durante las cuatro horas, ha estado en contacto con la médico-forense hasta que se ha resuelto el desencuentro. Finalmente, una vez cumplido el requisito, la funeraria ha podido llevarse el cuerpo sobre las 17.15 horas. Mientras que unos y otros se ponían de acuerdo, el cadáver ha permanecido en un garaje que continuaba en uso, tan solo tapado con una manta térmica, y velado por algunos familiares que tan solo querían garantizar la dignidad del fallecido. La familia ha querido dar a conocer su caso para mostrar su indignación, exigir una mayor coordinación y que ninguna otra familia tener que pasar por este mismo trance. Ingesa ha querido dar
su versión sobre la denuncia pública hecha por la familia del fallecido.