En la madrugada del sábado al domingo, en concreto este 31 de marzo, los ciudadanos europeos presenciará el habitual cambio de hora, marcando el inicio del
horario de verano en Ceuta. A las 2:00 de la mañana, los
relojes se adelantarán
automáticamente hasta las 3:00, extendiendo así la luz del día durante las tardes hasta el último fin de semana de octubre, momento en el cual los relojes retornarán al horario de invierno. Este ajuste horario, que afecta a todos los estados miembros de la
Unión Europea (UE), es una medida en cumplimiento con la Directiva Europea 2000/84/CE. A pesar de que la eliminación de estos cambios estacionales de hora ha sido objeto de debate en legislaturas anteriores, actualmente no está previsto en la agenda legislativa de la UE. El último informe sobre el cambio de hora, elaborado por la Comisión de Industria, Investigación y Energía del Parlamento Europeo en 2018, arrojó conclusiones interesantes. Aunque se ha argumentado que
estos cambios podrían traducirse en ahorros energéticos, se ha señalado que estos ahorros son "marginales" y no necesariamente se obtienen en todos los estados miembros.
En España seguirán produciéndose al menos hasta 2026
En el caso específico de España, el análisis más reciente sobre el impacto del cambio horario data de 2015 y no tiene en cuenta el contexto actual de nuevas políticas de eficiencia energética y cambios en los hábitos de consumo. Aunque la consulta pública realizada por la Comisión Europea en 2018 reveló un amplio apoyo para poner fin a los cambios de hora, la falta de consenso entre los estados miembros y las evaluaciones de impacto han retrasado la toma de decisiones. A pesar de que el Parlamento Europeo votó a favor de suprimir estos cambios en 2021, el Consejo aún no ha adoptado una posición definitiva al respecto. En España, el cambio de hora seguirá produciéndose al menos hasta 2026, según una orden ministerial publicada en 2022. Mientras tanto, se considera que existen otras medidas más relevantes para lograr ahorros energéticos, como la adopción de tecnologías más eficientes y la promoción de pautas de consumo responsable tanto en los hogares como en los lugares de trabajo.