Es la pregunta del millón, la que todos quisieran responder pero que no tiene respuesta al menos desde el 13 de marzo, cuando
la frontera que separa Ceuta de
Marruecos echó el cierre. La
Delegación del Gobierno confirma que no se va a abrir de momento, y que mensualmente se está analizando la situación epidemiológica que se da no solo en nuestra ciudad sino también en Marruecos. Cada mes se ve la situación y “de momento no es para abrir la frontera”, ha aclarado la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos en declaraciones a los periodistas en el transcurso de una comparecencia telemática con los medios de comunicación. Sí que esta situación está al menos sirviendo de alivio para avanzar en el desarrollo de las obras de reforma del paso del Tarajal. Mateos ha insistido en que “no se han parado” en ningún momento, y en que ahora están colocándose las cabinas de la frontera inteligente para que cuando se abra “sea una frontera del siglo XXI”. Es a lo que siempre aspiro la administración, a poner orden en un paso que comunica ambos puntos y para el que se trabaja en dos vías: que haya un control real de todo el que entra y sale y que, por otro lado, no exista el contrabando que llegaba a bloquear cualquier otro tipo de tránsito. A esto se suma como complemento
la obra de la carretera que conduce al Tarajal, la N352, que prevé inaugurarse esta misma semana y que permite una comunicación mejor con dos carriles de ida a la frontera y dos de vuelta. Ha sido un cambio de cara total y absoluto a un espacio en donde reinaba el caos. Es sin duda la obra estrella del Área de Fomento que se complementará con la apertura, cuando se pueda sanitariamente, del paso fronterizo.