Este domingo Ceuta ha registrado la víctima número 149 a causa de la
pandemia del coronavirus. Según han confirmado fuentes sanitarias de
Ingesa se trata de un varón de 84 años de edad que había sido diagnosticado mediante atención domiciliaria, según indica el último parte remitido desde el Medicina Preventiva de Ingesa. Este mismo documento indica que la
presión hospitalaria sigue estable con 10 pacientes ingresados después de que en las últimas horas se haya producido un alta hospitalaria, así como un nuevo ingreso. La buena noticia es que la UCI actualmente está vacía después de que el paciente que llevaba varias jornadas ingresado allí haya logrado reponerse y ser trasladado a Planta donde sigue recuperándose de la enfermedad. Concretamente venía siendo atendido en el clínico. Cabe recordar que actualmente 10 personas permanecen ingresadas en el hospital ceutí a causa del coronavirus que sigue existiendo aunque algunos crean que no. Cabe recordar que no se registraba una víctima mortal a causa de la pandemia
desde el día 18 de marzo cuando un hombre de 92 años, que venía siendo atendido en Observación de Urgencias, también perdió la vida. Y es que, aunque son meses en los que los índices de mortalidad por este virus son mucho menores que en los inicios de la pandemia en marzo de 2020, todavía esta enfermedad sigue desencadenando fallecimientos si bien a menudo se trata de pacientes con edad avanzada y, en otros, con patologías previas que impiden finalmente que el paciente derrote al covid-19. Sobre la evolución del virus en las últimas horas Ingesa ha notificado 116 brotes, la mayoría por contactos familiares . A pesar de que en la calle y en las actividades cotidianas se respire una casi total normalidad, no hay que olvidar que la enfermedad todavía está presente. Por lo tanto, continuar con comportamientos preventivos como el uso de la mascarilla, especialmente cuando no se puede guardar la distancia social de metro y medio, o un frecuente lavado de manos continúa siendo la mejor recomendación para evitar el contagio y, sobre todo, evitar ser portadores del virus hacia la población más vulnerable que, finalmente, es la que mayores dificultades presenta para superar el virus de manera exitosa.