Corsán actúa ya en un 50% del terreno en que se ubicará la futura cárcel

La empresa adjudicataria de la construcción de la nueva cárcel de Fuerte Mendizábal, Corsán, ha iniciado ya los preparativos previos para iniciar la ejecución del proyecto en una zona en la que ya han concluido los movimientos de tierra, según apuntan fuentes de la obra.

“Se puede decir que la obra ya ha empezado porque estos preparativos significan el inicio real de la misma, aunque los técnicos prevén que estará en pleno funcionamiento en el mes de septiembre”, aseguran.
Y es que Corsán trabaja actualmente en un 50% del terreno donde se ubicará el futuro centro penitenciario y cuyo movimiento de tierras ya se ha dado por finalizado. “Para evitar que la obra se retrasase se decidió comenzar en la parte donde ha terminado el movimiento de tierras”, añaden.
“Todo ese trabajo se ha solapado con el movimiento de tierras a la espera de concretar equipamientos necesarios para comenzar la obra en sí”, apuntan a la vez que insisten en que ya se está llevando a cabo el replanteo de la obra y la instalación de las casetas.
Ahora Corsán continuará trabajando en los equipamientos necesarios para el desarrollo del proyecto, para lo que será necesario dotar de vestuarios, aseos o incluso un comedor con servicio de catering para los propios trabajadores de la cárcel.
Esta iniciativa es muy habitual en otras localidades de la península en obras de gran calado, como es el caso de la futura cárcel. “Habrá momentos en que el número de trabajadores será muy elevado y se podría provocar un colapso importante tanto en la salida de la obra como en las carreteras colindantes cuando se produjera la salida del trabajo”. Este servicio, por tanto, posibilitaría al trabajador almorzar en la propia zona de la obra, sin tener que trasladarse hasta su domicilio.
“El comedor también repercute directamente en un mayor número de puestos de trabajo, directos o indirectos. Corsán cede el terreno y habilita una superficie para instalar esta dotación”.
Aunque el equipo técnico ya se ha constituido, la contratación de los entre 300 y 400 trabajadores que serán necesarios para ejecutar la cárcel se llevará a cabo a medida que se desarrolle el trabajo. “Ahora se ha recolocado a personal de otras obras que ya han terminado. A partir del mes que viene en que aumente el trabajo habrá que recurrir a personal que no esté en la empresa, bien a través de la Escuela de la Construcción que ya se han especializado en varios sectores o subcontratas”.

La instalación del abastecimiento comenzará en dos semanas

En un plazo de dos semanas dará comienzo la construcción de la tubería de abastecimiento que suministrará agua a la cárcel de Fuerte Mendizábal, un proyecto que ha sido adjudicado a Ferrovial, pero que también cuenta con la intervención de la empresa municipal Acemsa, mediante una actuación en los depósitos de Cabrerizas y Serrallo, desde los cuales se surtirá el complejo penitenciario. Precisamente Acemsa se ha comprometido a realizar ciertas mejoras en ambos depósitos, además de responsabilizarse de la red, una vez la empresa encargada de su ejecución haga entrega de la obra a la entidad municipal.
Además, en el recorrido de la red de abastecimiento, que comprende desde la carretera García Aldave, recorriendo la zona donde se ubican las naves de Hoarce y, finalmente, alcanzando el terreno de la futura cárcel, Acemsa se encargará de complementar la actuación con la sustitución y modificación de las tuberías más antiguas con el fin de “mejorar la alimentación de la zona y dotar de agua suficiente a la futura cárcel”, explica el director técnico de Acemsa, Juan Manuel Sánchez.
Hace dos semanas técnicos de Acemsa y del SIEP comprobaron en trazado de la obra a fin de empezar a la mayor brevedad posible.
La red de abastecimiento que surtirá de agua la red es una tubería de fundición de 250 milímetros, unas dimensiones importantes dada el gran número de personas a las que surtirá, “es una tubería importante por la población a la que va dirigida ya que está diseñada para 2.000 personas”.
Con un suministro diario de 700 metros cúbicos, la idea es que el centro penitenciario de Fuerte Mendizábal se convierta en un núcleo independiente que, al contar incluso con lavandería propia, aumente el consumo de agua.
En caso de avería de la red, la cárcel dispone de un aljibe con capacidad para ciertas horas, “el tiempo de que dispondremos para solventar la avería”.

Los datos

Obra
Fuentes del proyecto han asegurado que la “obra ya ha comenzado” en cuanto se están llevando a cabo la instalación de las casetas o el replanteo de la obra. El equipo técnico ya se ha constituido y desde Corsán están trabajando ya en la zona donde ya han finalizado los movimientos de tierra, que supone un 50% de la superficie total del área en la que se instalará el futuro centro penitenciario.
Contratos
La contratación de trabajadores se llevará a cabo a medida que avance la obra, aunque Corsán tiene intención de ‘recolocar’ a los obreros de otros proyectos que ya han concluido, además de aquellos procedentes de las subcontratas necesarias para la ejecución de este complejo.
Comedor
Entre las dotaciones de que dispondrá la cárcel durante su ejecución se habilitará un comedor para posibilitar que lo trabajadores almuercen sin tener que trasladarse hasta sus domicilios. El objetivo es evitar importantes colapsos en la carretera cuando el número de obreros sea muy elevado.