La negativa evolución epidemiológica de la pandemia en Ceuta, que ayer ya mostraba los niveles de incidencia acumulada de nuevos positivos diagnosticados por cada 100.000 habitantes más alta de España, está fortaleciendo la idea de buena parte de la comunidad musulmana de Ceuta que aboga por cerrar las mezquitas durante el mes de Ramadán alrededor de las 21:00 horas, antes del rezo de Isha (de asistencia obligada para los fieles varones todo el año) y Tarawih (específico de Ramadán), que en el mes sagrado de ayuno musulmán son especialmente concurridos.
La decisión definitiva se tomará a finales de esta semana, en función de cómo evolucione la coyuntura sanitaria durante los próximos días, de las restricciones que imponga el presidente de la Ciudad a partir del próximo domingo (cuando prevé devolver a las 22.00 horas el inicio del toque de queda nocturno) y de la reunión prevista para el viernes entre la Delegación de la Comisión Islámica de España (CIE) y el Ejecutivo local.
A expensas de esos factores, el incremento de la detección de nuevos casos diagnosticados, el más que probable adelanto de la hora desde la que está prohibido estar en la calle y, sobre todo, “razones de prudencia y responsabilidad con la Salud Pública”, hacen creer a las fuentes consultadas por este periódico que “lo más coherente sería cerrar los templos antes de los últimos rezos y que, tal y como estipula la jurisprudencia islámica, los fieles los hagan de forma segura en sus casas habida cuenta de que también se mantendrán las limitaciones de aforo vigentes desde hace meses en cualquier espacio religioso”.
Hora del toque de queda. Tras el cambio de hora para pesar a la de verano el momento del rezo de Isha, el último día, ya queda fuera del límite al que se prevé devolver desde el próximo domingo el inicio del toque de queda nocturno (22:00 horas). Sumado al específico de Ramadán (Tarawih), su duración conjunta se alarga hasta cerca de 60 minutos, con lo que su mantenimiento sería casi inviable respetando las restricciones ni aunque no se variase la limitación de movilidad por las noches actualmente vigente de 23:00 a 6:00 horas.
Aforo: un tercio y no más de 75 personas. Al margen de la cuestión estrictamente horaria, los rezos del ocaso en tiempo de Ramadán son “especialmente concurridos”, lo que complicaría su encaje con las restricciones vigentes de aforo en los templos de cualquier confesión (un tercio del total y nunca más de 75 personas). Pocas mezquitas cuentan, además, con espacio para que los fieles oren al aire libre.
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