Ceuta cuenta con un número de casos muy elevado para la cantidad de habitantes que tiene y para el personal sanitario del que dispone. Eso hace que, por ejemplo, nuestra ciudad cuente con una presión hospitalaria que hace que los sanitarios se encuentren desbordados y tengan turnos de trabajo interminables para intentar abordar una pandemia que está azotando con fuerza nuestra ciudad. Es tal el elevado número de casos, que ha llevado a que hasta 1.500 personas estén confinadas en sus hogares por ser contacto estrecho de los positivos. Hasta hace unas semanas, esos contactos permanecían en sus casas, hasta que personal sanitario se trasladaba a sus hogares para realizarle la prueba de PCR y confirmar si esa persona se había contagiado de su contacto o permanecía sin el virus.
Todo se ha visto tan superado, que según denuncian a este periódico varios ciudadanos, no les realizan las pruebas en sus domicilios y son ellos mismos los que tienen que desplazarse hasta el centro de salud más cercano para realizarle las pruebas. “Me han confinado por ser contacto estrecho de un positivo y me llamaron para comunicarlo. Pregunté que cuándo vendrían a mi casa para realizarme la prueba de PCR y me dijeron que estaban desbordados y que me daban una cita para acudir a mi centro de salud correspondiente y que ellos me harían la prueba”, explicó una de las denunciantes a El Faro de Ceuta.
Los ciudadanos no entienden que les manden aislamiento obligatorio por si habrían contraído el virus y se tengan que desplazar hasta el centro de salud con el riesgo que conlleva. Además, porque algunas de esas personas tienen síntomas y eso hace que se ponga en riesgo la salud de otras. “No entiendo que se me diga que tengo que ir al centro de salud, pero que mientras, esté confinada por si contagio a otra persona. Entiendo que haya muchos casos y personas aisladas, pero no pueden poner en peligro la salud de otros ciudadanos que están sanos”, reiteró. Por último, afirmó que el único consejo que les dieron fue que no utilizaran “el transporte público” y que mejor lo hicieran andando para así evitar, si tenían el virus, contagiar a otras personas. “Me dicen que no puedo coger un taxi o un autobús, que es un riesgo para otras personas, que por favor utilice una mascarilla nueva y vaya sola andando hasta mi centro de salud, me realice la prueba y vuelva de inmediato a mi domicilio. Es un sinsentido”, finalizó.
Por su parte, el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) ha querido aclarar que allí lo que está haciendo son test de antígenos en un circuito Covid, bien especificado y cumpliendo con todas las medidas sanitarias y de seguridad, para que ningún paciente se mezcle con los pacientes no Covid o con los pacientes con los síntomas respiratorios. Las PCR se siguen haciendo en los domicilios, ha puntualizado la organismo responsable de la sanidad asistencial. Los test de antígenos son 15 minutos, se cogen los test, se abarata el tiempo y ya se puede poner en confinamiento domiciliario, o si requiere de un ingreso, pero se aísla a la persona y sus contactos.
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