La titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta ha condenado a 3 personas por diferentes delitos contra la salud pública.
Una acción delictiva muy habitual en nuestra ciudad que topa con los controles ejecutados en el embarque. Los tres acusados reconocieron los hechos aceptando las distintas penas.
Por un lado, el llamado T.A.H. ha sido condenado a 3 años y 6 meses de prisión así como al pago de una multa de 137.814 euros con 3 días de responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago.
Los hechos a los que se hizo referencia en esta conformidad ocurrieron el 16 de septiembre de este mismo año. Sobre las nueve de la mañana el ahora condenado se encontraba en el puerto de Ceuta en el control de preembarque de vehículos cuando al infundir previas sospechas a los agentes de la Guardia Civil que prestaban servicio en la zona le requirieron para la inspección del vehículo en el que viajaba.
Como consecuencia del registro fue hallado oculto en el interior de los huecos naturales del maletero, del salpicadero y en la rueda de repuesto varios bloques de hachís que tras su análisis arrojó un peso bruto de 20 kilos con un índice indiciariamente superior al 41,95% y con un valor en el mercado de 137.814 euros.
Esta sustancia pensaba ser destinada por el acusado a la venta o donación a terceras personas. Se encontraba en prisión provisional por esta causa desde el 17 de septiembre.
Otra de las condenadas ha sido L.A.F.L. La acusada de nacionalidad francesa reconoció los hechos y aceptó la pena de 3 años y 2 meses de prisión con una multa de 82.268 euros con 3 días de responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago.
Los hechos a los que se hizo referencia en esta conformidad ocurrieron el 23 de septiembre de este mismo año. Sobre las 22:00 horas la acusada también se encontraba en la zona de preembarque para acceder al ferri cuando al infundir sospechas a los funcionarios de la Guardia Civil que prestaban servicio de control e identificación en la zona, procedieron a solicitarle el reconocimiento del vehículo
Como resultado de aquel reconocimiento, se halló oculto en un doble fondo en el paragolpes trasero y en un cajón soldado al chasís del vehículo intervenido, 22 bloques de hachís con un peso total de 12,5 kilos, con un índice de THC del 31% y con un valor en el mercado de 82.268 euros.
El último de los acusados por este delito fue S.T., persona que reconoció su culpa y aceptó la pena de 3 años y 9 meses de prisión, así como una multa de 187.298 euros con 3 días de responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago.
Estos hechos ocurrieron hace poco tiempo, concretamente el 12 de octubre, cuando se encontraba con el propósito de embarcar en el trasbordador con destino a Algeciras. Al infundir sospechas a los funcionarios de la Guardia Civil que prestaban servicio procedieron a la intervención propiedad de un tercero cuya participación en los hechos no está acreditada que usaba para desplazarse.
Como consecuencia del registro se encontró oculto en el mismo la cantidad de casi 28 kilos de hachís con un índice de THC del 41%, que pensaba destinar a la venta o donación a terceras personas.
El Ministerio Fiscal se opuso en las tres conformidades a la suspensión de la pena ya que superaban los dos años de prisión, además que dos de ellos contaban con antecedentes penales de la misma índole. Cumplirán cárcel.
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