El tribunal de la Sección VI de la
Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta ha condenado a los cuatro detenidos en una
operación de la Guardia Civil por su presunta relación con un cargamento de hachís que fue interceptado en un pesquero, en el transcurso de una actuación llevada a cabo en 2019. La figura jurídica de la conformidad ha evitado la celebración de la vista oral que se había señalado en la Audiencia este martes, después de que los cuatro acusados hayan reconocido su vinculación con un
delito contra la salud pública. Los llamados F.J.P.P., J.J.B.M., A.M.P.M. y A.M.C. han aceptado ante el máximo órgano judicial las penas impuestas. Así, todos ellos han sido condenados por delito contra la salud pública, concurriendo las circunstancias modificativas de la responsabilidad criminal de dilaciones indebidas muy cualificadas, al haberse señalado la vista oral en mayo de este año por causas no imputables a los acusados quienes, de hecho, cumplieron ya el tiempo máximo en prisión preventiva,
siendo puestos en libertad en marzo de 2021. En el caso del acusado A.M.C. se ha aplicado la circunstancia agravante de reincidencia en el delito. A dos de los acusados, F.J.P.P. y J.J.B.M. se les ha condenado a 1 año y 11 meses de cárcel, además de multa de 382.681 euros. Al llamado A.M.P.M. se le condena a 1 año y 10 meses de prisión con la misma multa. Y en el caso de A.M.C. la condena es de 1 año y 9 meses con la responsabilidad económica del mismo montante que al resto. Todos han aceptado las condenas, dictándose la sentencia in voce por parte del magistrado presidente del tribunal.
Los hechos: operativo en el puerto pesquero y Juan XXIII
Los cuatro acusados, de mutuo acuerdo, se coordinaron para perpetrar un traslado de hachís que iba a ser introducido en la Península a bordo de una
embarcación pesquera. Fue en abril de 2019 cuando dos de los acusados acudieron con su furgoneta al puerto para meter la sustancia dentro de la embarcación. La Guardia Civil sospechó de esta maniobra y los interceptó, hallando ya dentro del vehículo casi 280 kilos de esta droga. El operativo no terminó ahí ya que la Benemérita sospechó que esa carga debía abastecer otra mayor, así que procedieron al registro del barco Nuevo Genaro, del que los dos individuos eran titulares, encontrándose dentro casi 250 kilos de hachís más.
En total, se había preparado ya el pase de una media tonelada de droga. Los dos detenidos in fraganti contaban con apoyo de otros dos, que daban así la cobertura necesaria a los transportistas para alertar de la presencia de fuerzas de seguridad. Con las indagaciones hechas sobre los teléfonos móviles de los primeros detenidos se llegó hasta el resto, organizándose otra operación de la Guardia Civil realizada en mayo de ese mismo año en la barriada de Juan XXIII, en donde se ejecutaron los demás arrestos.