Han tenido que pasar 7 años para que se dicte sentencia en torno a una operación contra el narcotráfico llevada a cabo en Ceuta por la Udyco en noviembre de 2017, teniendo como escenarios la barriada del Príncipe y una vivienda ubicada en Avenida de África.
Los agentes que lideraron aquella investigación ni siquiera están ya en esa unidad, los más de 1.200 kilos de hachís decomisados fueron destruidos tras su análisis y los 13 acusados que este miércoles se sentaron en el banquillo ante la titular del Juzgado de lo Penal número 1 reconocieron la comisión de los hechos delictivos y se conformaron con las condenas notificadas de viva voz por su señoría.
Así, se impuso 1 año y 3 meses de prisión por delito contra la salud pública con la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas y multa de 4 meses con cuota diaria de 4 euros diarios por delito de integración en grupo criminal para 11 de los acusados.
Esas condenas quedaron suspendidas durante un periodo de 2 años salvo en dos casos en los que los investigados no cumplían con los requisitos exigidos para acogerse a ese beneficio al tratarse de reincidentes, por lo que se fijó un plazo para su entrada en prisión.
Los otros dos acusados aceptaron condenas de cinco meses de prisión por delito contra la salud pública.
Resolución judicial para uno de los operativos estrella
Se pone así el punto y final a un procedimiento que se inició en 2017, cuando la Udyco irrumpió en una vivienda y garaje ubicados en el Príncipe ante la sospecha de que se ocultaba gran cantidad de droga.
Ese era el centro de la actividad delictiva de un grupo de personas que cooperaban para alimentar este negocio, cada uno con un rol determinado.
Así, figuraba una especie de responsable que repartía y distribuía esos roles, realizando funciones de supervisión y vigilancia de la droga. Otros ejercían funciones de contravigilancia y los había también encargados del transporte.
A otros de los acusados se les atribuyeron funciones de embalaje y preparado de la droga.
Hubo registros no solo en el Príncipe, sino también en una vivienda ubicada en el edificio Azul Mediterráneo, en Avenida de África, desarrollados todos ellos entre el 27 y 28 de noviembre de 2017.
Los agentes decomisaron más de una tonelada de hachís. En concreto en el registro del Príncipe sacaron 58 sacos con 1.789 bloques que alcanzaron un peso de 917 kilos de esta droga. A ellos se sumaron otros 15 sacos con cápsulas de hachís que pesaron 277. En el registro en Avenida de África se hallaron otros 92 kilos de hachís.
Cuánto trabajo de la Policía para tan poca condena! Y cuanta desgracia personal con el consumo de droga! No entiendo como hay tanto religioso que luego se dedica a cometer estos delitos!
Vergüenza de justicia que tenemos , gente por mucho menos pagan más.
Con razón hay tanto narcotraficante, con esas condenas tan ridículas en caso de que te pillen y luego te condenen. De risa.