Salieron del juzgado con penas de alrededor de seis meses, librándose así de los seis años que pedían en el menor de los casos. Los dos hombres que se enfrentaban a penas de hasta seis años y medio de prisión fueron juzgados ayer y se puede decir que salieron victoriosos del envite. Ambos se conformaron con la pena que les ofrecía la representante del Ministerio Fiscal y reconocieron los hechos, aunque hasta minutos antes del juicio sostenían su inocencia y confiaban en que la víctima dijera que ellos no habían sido los autores de los disparos, tal y como ellos mantenían. Finalmente, hubo acuerdo entre las partes y el Fiscal rebajó la pena de seis años (en el menor de los casos) por los delitos de lesiones y tenencia ilícita de armas, dejándola en siete meses y quince días de prisión para A.L., que tenía antecedentes, y seis meses de prisión para B.G. únicamente por el delito de lesiones. El forense estimó que este último acusado tenía un pequeño problema mental que podría haber afectado levemente sus capacidades intelectuales durante los hechos y el Fiscal apreció la atenuante de enajenación mental. La jueza absolvió a ambos del delito de tenencia ilícita de armas, ya que se eliminó toda referencia a la pistola en el escrito judicial. La condena de A.L. coincide con el tiempo que ha pasado en prisión preventiva por este caso, por lo que tras el juicio fue puesto en libertad. En cuanto a B.G, su condena se sustituyó por el pago de una multa de 720 euros (seis meses a dos euros la cuota diaria), aunque no abandonará la cárcel porque está preso por otra causa.
Los hechos que se les han imputado a ambos sucedieron el día 3 de junio de 2010, sobre las 21.00 horas. La víctima, un joven de 21 años llamado Ismael Mohamed Ahmed, fue interceptado en el Príncipe Alfonso, a la altura del número 42 de la Agrupación Sur, al menos por dos personas. Oficialmente, se trataba de los dos acusados, que le agredieron causándole una serie de lesiones. Extraoficialmente, lo que se denunció fue que uno de los acusados le roció a Ismael los ojos con un spray, probablemente para impedir que pudiera reconocer a su agresor y, posteriormente, otro le disparó en la pierna izquierda, alcanzándole el peroné. En sus declaraciones a la Policía, la víctima identificó a sus supuestos agresores como el ‘Yanquie’ y ‘Manolo’, por eso fueron ellos los que se sentaron en el banquillo. Tras aquellos sucesos, la UPR desplegó un dispositivo denominado como ‘jaula’, por el cual se controlaron todos los puntos estratégicos de la barriada para impedir la huida de los culpables. Los dos jóvenes condenados fueron detenidos semanas más tarde, el día 22 de junio, por la Policía.
Cuatro personas que transitaban por la zona introdujeron en un vehículo particular al joven lesionado para trasladarle hasta el hospital Universitario, donde le dejaron para que fuera atendido. El tiro le había producido una herida con un impacto de bala de entrada y salida, sin demasiada gravedad. Además, sufrió una conjuntivitis provocada por el líquido con el que le rociaron los ojos.
Precisamente por esas lesiones los acusados deberán pagarle a Ismael Mohamed un total de 11.235 euros en concepto de responsabilidad civil, indemnización, por las lesiones que le provocaron y que constaban en el partes médico. Esta cantidad deberá ser abonada conjunta y solidariamente, aunque la jueza dividió la indemnización por la mitad e impuso a cada uno el pago aplazado en 24 meses para facilitar que los acusados pudieran hacerle frente.