“O terminas en la cárcel o en el cementerio de Sidi Embarek”. Estas fueron las amenazas que a juicio de la magistrada titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta deben recibir una condena.
Tanto es así que ha impuesto a quien las profirió una pena de 1 mes de multa a razón de 10 euros diarios por un delito de maltrato de obra y otra de 6 meses de prisión por amenazas.
A esto suma 2 años y medio de prohibición de aproximarse a menos de 200 metros del denunciante así como otros dos años y medio de prohibición de comunicarse con él.
Se considera probado que el llamado L.A.L., acompañado de otro individuo declarado en rebeldía y ambos con un amplio historial delictivo, abofeteó al denunciante para después amenazarle con la siguiente frase: “Te vamos a matar, estás en nuestro territorio. Tienes que trabajar con nosotros, o terminas en la cárcel o en el cementerio de Sidi Embarek”.
Aquellos hechos ocurrieron en la barriada del Príncipe en junio de 2021 y las amenazas se hicieron para que la víctima accediera a formar parte de la banda del ahora condenado.
El relato que sobre lo sucedido ofreció el denunciante ha sido determinante para el dictado de esta condena. Su narración fue “lineal, contextualizada temporal y espacialmente”, concurriendo una perfecta “concordancia entre el lenguaje y el paralenguaje empleado con el lenguaje gestual”. El miedo que tenía a sufrir algún ataque era tal que acudió incluso a denunciar a la UDYCO.
La declaración ha resultado creíble, por cuanto “persistente y coherente” con el contexto en el que se hicieron las amenazas. Además, en el acto de juicio oral se apreció la situación de pánico que se había sufrido.
En sentencia, a cuyo contenido ha tenido acceso El Faro de Ceuta, se considera que frente a esa manifestación, el acusado mostró una actitud fría, con relatos inconexos. Una actitud que junto a su declaración “fragmentaria, vaga, desordenada e imprecisa” viene a dotar de credibilidad la versión acusatoria.
Las expresiones proferidas fueron graves y se dieron además en un contexto de luchas de poder y de las bandas de narcotráfico. Los antecedentes del acusado y el contenido de las expresiones ha permitido considerar los hechos como un delito de amenazas que ha motivado la condena dictada además de la imposición del pago de las costas.
“Está en el cielo por donde esté”. Aixa Mohamed recuerda a diario a quien era…
En el mundo de las estafas, la creatividad de los delincuentes no tiene límites. Echan…
El Poblado de Regulares cuida, como el tesoro que son, a las viudas de los…
El pasado mes de octubre en el Congreso de los Diputados se votó a favor…
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha escogido a un militar en la…