Bajo una tenue luz blanca, Javier Ruibal ha aparecido a solas en el escenario. Su voz a capela ha resonado en el Teatro Auditorio del Revellín. "Piensa que el tiempo no existe, que eres el mismo de antes". Verso a verso, el cantautor ha tornado el escenario en un espacio íntimo y se ha desnudado como artista ante el público de Ceuta que, desde el primer momento, lo ha recibido entre aplausos.
Encandilados por el talento y la personalidad desenfadada del músico, los asistentes solo han interrumpido la actuación para bañarlo en aplausos. A pesar de un pequeño fallo técnico, el artista portuense ha continuado con el concierto sin dejar atrás un visible buen humor con el que, desde el inicio, se ha ganado a los espectadores.
Antes de dar paso a su repertorio, el cantante no ha querido desaprovechar la ocasión para agradecer a los asistentes que hayan “cuidado” de esta parte de su obra, composiciones nacidas en los inicios de sus canciones que aún perduran “permanentes en el tiempo. Estamos muy contentos de tocar y cantar este repertorio”. Un discurso que ha finalizado de forma emotiva. “Me habéis dado la vida”, ha agregado.
Javier Ruibal celebra los treinta años de Pensión Triana en el Revellín. El cantautor portuense aterriza en Ceuta para deleitar al público a golpe de jazz, flamenco y ritmos sefardíes-magrebíes.
El músico llega a la ciudad con esta gira para conmemorar el disco Pensión Triana, grabado en directo a principios de los noventa. Así, sobre el escenario, ha recuperado el repertorio de tres trabajos publicados a finales de los 80. El portuense cuenta con una larga trayectoria que le ha valido el Premio Nacional de Músicas actuales en el año 2012 y el Goya 2020 a mejor canción original.
Manu Sánchez, pianista del grupo instrumental, ha emergido en escena para acompañarlo en su primera canción. A través de la tranquila melodía y la voz de Ruibal con tonos flamencos ha debutado en París ‘la flor de Estambul’. La historia de ‘Pensión Triana’ ya había regresado de nuevo, pero, esta vez, en el Teatro Auditorio del Revellín.
Completamente entregado al público, el portuense ha arrancado su actuación junto a los músicos Diego Villegas, Manu Sánchez, José Recacho y Javier Ruibal, con una pieza en la que la principal protagonista ha sido la instrumental. Los quejíos del cantautor se han fundido en las butacas del Revellín para regalar a los ceutíes un espectáculo diferente alejado de ornamentos recargados y completamente alineado con la sencillez. Un concierto de los de toda la vida en la que la voz y la música son sus únicos pilares.
La impronta de poetas del 27 como su paisano Rafael Alberti se han dejado entrever en esta actuación que se remonta a los albores de la carrera artística del andaluz. La noche se ha anticipado con el cantante. Vestido por un ambiente oscuro e iluminado solo por luces violetas, el músico ha demostrado su polivalencia con composiciones misceláneas donde se han fundido sus raíces propias con las de otros lugares lejanos.
El Revellín ha metamorfoseado en un concierto de noche clásica de garito con canciones que encierran el tesoro de distintos folclores.
Una hilera de multas. Una detrás de otra impuestas como resultado de la acción irracional…
Tras casi dos semanas de incertidumbre, la desaparición de Mohamed Lagrit se ha resuelto de…
El Sindicato de Enfermería (Satse) de Ceuta ha abierto el plazo de inscripciones en el…
Era mayo de 2023. La Guardia Civil abría una investigación para esclarecer el robo de…
La Real Federación de Fútbol ha dado a conocer los horarios de la jornada decimoséptima…
¿La Ciudad nos toma por tontos? Es lo que se preguntan los trabajadores de la…