El comienzo del Ramadán junto al mes y medio de confinamiento en nuestros hogares por el estado de alarma en el que nos encontramos por la pandemia del coronavirus ha provocado que los comercios a los que se les permite abrir hayan tenido que cambiar de hábitos y forma de venta. También los comerciantes aseguran que los clientes tienen otras preferencias a la hora de adquirir los productos, además de ser más previsores en general. FaroTV ha salido a la calle para ver cómo sobreviven los diferentes comercios y cómo han cambiado las ventas.
La tienda de venta de productos para animales, Reinoso, ubicada en el centro, sí que ha cambiado las ofertas más vendidas. Ahora el reparto a domicilio ha aumentado muchísimo desde que comenzó el estado de alarma, “ha crecido entre un 300 y 400% desde que se decretó”, asegura Pedro Sánchez López, técnico de ventas de Reinoso.
Han pasado de repartir dos días a la semana a que lo hagan todos: de lunes a sábado. Además, los clientes son más previsores y se llevan el doble o incluso el triple de sacos de comida para no volver a la tienda a comprar, ya que eso conlleva el salir a la calle y “aprovechan y se llevan algún juguetito para el perro o el gato que no estén muy aburridos. Como no tienen el desfogue de salir, así desfogan física y mentalmente”, cuenta Sánchez.
Por otro lado, están contentos porque el horario impuesto no les ha afectado, el técnico dice que “por la tarde estamos dos horas, hasta las ocho. Así que no nos ha perjudicado en nada”. Y suponen que el Ramadán tampoco, porque sus clientes musulmanes siguen yendo a comprar como todos los años, “afecta más el estado de alarma”, concluye.
“Nuestros clientes siempre vienen con las ideas claras porque llaman previamente”
¿Quién no tiene uno –incluso varios– dispositivos electrónicos? En la tienda de telefonía y electrónica Ratán ahora venden artículos menos específicos. Antes del confinamiento tenían más variedad. Además, los clientes prefieren acudir al establecimiento por algo urgente o, sino, a por productos de entretenimiento. Rocío García, dependienta del comercio, cuenta a FaroTV que “siempre hemos tenido un gran surtido de ventas, pero ahora son más de necesidades. Un protector de pantalla, una pantalla rota, cargadores… Ahora vendemos sobre todo entretenimiento o tabletas para clases online”. Sin embargo, sí que han cambiado el tipo de venta. A raíz del confinamiento han abierto y renovado su página web donde muestran los productos con sus precios y los envían a domicilio. “Desde que comenzó el confinamiento en nuestros hogares abrimos nuestra web donde repartimos a domicilio y pagan el producto a través de ella. No hace falta ni efectivo. La venta online ha sido una novedad en nuestro establecimiento y han crecido mucho las ventas”, cuenta García. “Nuestros clientes siempre vienen con las cosas claras porque han visto los productos en la web. O, sino, nos llaman para cerciorarse de que tenemos lo que quieren comprar y no salir a la calle en vano”, asegura la dependienta.
Los horarios de apertura y cierre los han estudiado pensando en la seguridad por el estado de alarma pero, aún así, no les han afectado en ventas. La trabajadora confiesa que “no ha afectado el confinamiento, pero sí que replantearon cuántas horas abrir para cumplir las normas. Trabajamos las siete horas laborales, y abrimos hasta las 19.30 horas, como les viene bien a los clientes”, termina.
“Han aumentado, sobre todo, la venta productos de entretenimiento para niños”
La tercera parada de FaroTV ha sido la Librería General. Con dos trabajadores no pueden enviar sus productos a domicilio, pero los clientes ahora compran más productos de entretenimiento que nunca. Respecto a las ventas, Emilio González propietario de la librería, cuenta que siguen “siendo parecidas, aunque vendemos, además de tabaco, más papelería, muchas revistas…”. Y asegura que los clientes son más previsores y compran más cantidad, “sobre todo para entretener a los niños. Compran acuarelas, pintura de manos, témperas... Son artículos que hemos aumentado en ventas”, cuenta González. Además, antes lo más vendido eran boletos de lotería y eso ya no es así “porque tenemos cerrado el sistema”.
El horario del establecimiento sigue intacto –10.00-13.30 horas y 17.30-20.30 horas– desde que se decretó el estado de alarma, así que no les ha afectado. Respecto al comienzo del Ramadán, cree que afectará a las ventas. Pero después se estabilizarán porque “los musulmanes se irán adaptando ellos también, y supongo que saldrán a comprar por las tardes”, concluye González.
Los repartidores de supermercados son los que más trabajo tienen estos días. El envío y reparto a domicilio se ha disparado durante este confinamiento. Incluso han habilitado un número de WhatsApp para facilitar la compra al cliente.
Cuenta Ilias Benabdellah, reponedor de un supermercado, que “la entrega en casas ha aumentado mucho. Tenemos servicio también por WhatsApp y estamos desde las nueve de la mañana hasta las cinco de la tarde preparando envíos”. Y “la venta ahora ha subido, la gente compra más cantidad que antes, por eso estamos nosotros”. Además, está seguro de que la llegada del Ramadán va repercutir mucho en ventas porque “es lo normal”, conluye.
Los pequeños y grandes comercios abiertos durante el estado de alarma han cambiado sus rutinas y su modo de trabajar, pero siempre por los demás. Para que la normalidad llegue cuanto antes.
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