El director provincial de Educación, Javier Martínez, ha explicado este jueves que tras “una agresión entre tres alumnos de 2º, 3º y 4º de Secundaria” el Colegio Concertado Severo Ochoa “ha adoptado todas las medidas oportunas y ha abierto un expediente disciplinario a los presuntos agresores que lleva un proceso de toma de declaración a todos los que han intervenido para la adopción de las medidas disciplinarias que considere oportunas”.
En paralelo, la Dirección Provincial, que ha actuado una vez conocido el hecho por parte de la familia de uno de los implicados, va a comisionar al miembro de la Inspección de Educación de referencia para ese centro con el propósito de que se asegure de que se ha puesto en marcha el Protocolo de Acoso Escolar, si no ha sido así, en el caso de que se identificase como tal el caso registrado.
“Todo está perfectamente encauzado desde el momento en el que el centro inicia el procedimiento disciplinario contemplado en la normativa con la designación de un instructor, la toma de declaración, la formulación de una propuesta de resolución y la decisión definitiva del director”, ha aseverado Martínez.
El director provincial ha dejado claro que “vamos a ver si es un caso de acoso o si, al finalizar el expediente, se concluye que se trata de una agresión como las que se producen a veces en este y otros ámbitos”.
Así actuó el ‘Severo Ochoa’
Los servicios jurídicos del colegio Severo Ochoa han detallado a ‘El Faro’ que esa pelea se produjo a las 14.30 horas fuera del recinto escolar y que, de la misma, tuvo conocimiento por una de las hermanas de la víctima que hizo una comparecencia y presentó el parte de atención médica al joven.
De inmediato, asegura, se abrió un expediente disciplinario nombrándose un instructor para recabar toda la información sobre lo sucedido. Se está tramitando y se trabaja al detalle para conocer todas las versiones y datos. De momento los dos estudiantes señalados como agresores han sido apartados 5 días del centro como medida cautelar.
Ahora, con ese expediente disciplinario puesto en marcha se trata de averiguar si se está ante un asunto de acoso escolar o no. Porque no se debe hablar de manera gratuita de algo así. No todas las agresiones responden a un acoso, una situación esta que debe tener una serie de características. Es precisamente lo que se investiga y para ello se tiene que hablar con todas las partes.
Será el Consejo Escolar el que tenga conocimiento del resultado de ese expediente disciplinario que, se confía, estará ya el lunes. Será entonces cuando el colegio pueda concretar qué es realmente lo que ha ocurrido.