Hay que prepararse para los nuevos horizontes con sus usos y costumbres correspondientes, ya que vamos camino de ser la Venezuela europea, que curiosamente son los más antiguos, por ejemplo, en vez de calefacción central mediante gas o electricidad habrá que rescatar el brasero con el picón y la paleta bailando una danza de calor y como no, la mesa camilla, tan acogedora ella donde se juega al parchís al tiempo que se oye en “la radio” a Matilde Perico y Periquín en Radio Caracol. Ahí se juntará la familia y se preguntarán unos a otros como les ha ido, cuantos chuscos han podido conseguir y si es que hay algo de carne para esta sopa tan aguada, calentada con buena leña. ¿Cómo se llamará entonces nuestro “país”, Hispanozuela, Venespaña, quién ganará Pablo o Pedro?, yo creo que el del moño, es igual, los dos nos llevan al mismo sitio.
Y es que el cocinar con leña es un placer, vaya usted a un buen restaurante de Lerma o Peñafiel y verá lo infinitamente agradable que es sentarse a la mesa mientras el olor de las brasas inunda el comedor a la espera un buen lechazo, que no puede ser asado con una moderna cocina de gas, no, tiene que ser leña la materia prima de la combustión. Y es que cada día debe ser más placentero cocinar con leña, claro habrá que tener una buena leñera y niño, arranca todas las ramas que puedas de los árboles cuando vengas del cole. Para que vean lo agradable que es esta antigua, pero nunca desterrada forma de combustión, les señalo que nuestros hermanos venezolanos de Barinas, Ciudad Bolívar y Porlamar en nuestras queridas provincias de Venezuela, se quejan porque en esas ciudades falta el servicio de gas continuo, por lo que tienen la inmensa suerte de preparar sus alimentos con leña o carbón, de acuerdo con un estudio realizado por el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos, y es que este Observatorio está en todo, de ahí al comandante o transportista, perdonen pero es que no sé el empleo que tiene ahora el tal Maduro, ni un segundo. Enseguida se enterará y por supuesto lo arreglará, pues bueno es él. Una vez arreglado, es decir, todos con leña, irá a la emisora más cercana a su Aló Presidente para que le ensalcen todos los ciudadanos y le bailen un joropo, aunque esta vez parece que no ha podido, paren el baile.
La leña, como casi todo el mundo sabe, nace, se cría y muere con los árboles, y cuando son grandes, dan sombra, producen oxígeno y atraen a las nubes que llueven sobre los bosques, pero claro si les hace falta a los venezolanos porque no tiene gas, estos no tienen más remedio que cortar esos árboles , aunque su combustión produzca enfermedades respiratorias incrementadas en esta época por el maldito virus; en los últimos meses se han registrado numerosos casos de niños quemados en los fogones, o de mujeres asfixiadas por el humo. Por otra parte se produce un daño difícilmente reparable debido a la deforestación. Ya se están quejando con razón los ecologistas en los estados de Bolívar, Anzoátegui, Sucre, Táchira y algunos más, de talas de pinos y eucaliptos para su venta como leña para cocinar. Pero es que la falta de gas llega hasta la mismísima Caracas donde ya hay largas colas para poder comprar las ansiadas bombonas y el tito Zapatero y sus mariachis, los podemitas, aquí tan tranquilos sin coger el avión y quedarse allí una temporadita, que ingratos son, con lo rápido que ellos solucionan lo de otros. Y claro, es que este problema es importante pues Venezuela pasó de ser el octavo productor de gas mundial a un país en el que hay que esperar en algunos casos hasta seis meses para comprar una bombona de gas , lo que es grave teniendo en cuenta que el país ha pasado de producir 3,3 millones de barriles diarios de petróleo a 300.000, y por ahora no hay Zapatero ni zapaterines que lo sepan arreglar. La electricidad tampoco es una solución al problema de la falta de gas por las continuas interrupciones de suministro en la red eléctrica, produciendo apagones intermitentes, así es que a por leña.
Una vez recogida la leña, hay que irse pronto a casa y por supuesto no se le ocurra nunca dejar la casa sola, siempre tiene que haber alguien y es que un estudio realizado por Property Rights Alliance, organización de la que forma parte el Centro de Divulgación del Conocimiento Económico para la Libertad (CEDICE Libertad) para conocer el grado de respeto de la propiedad privada y en el que participan 129 países, sitúa a Venezuela en el puesto 127 solo delante de Haití y Yemen. Claro, tanto “exprópiese, exprópiese” tiene que pasarle factura. Pero no hay que preocuparse, nuestro amado líder Maduro, que junto a los dos zánganos de aquí formará un triunvirato y lo que no se le ocurra a uno se le ocurrirá al otro, y si no siempre quedará un Borrell, que nos indicará el camino, por supuesto el del Yemen , ¿no les parece lo árabe, sublime, encantador, parecernos al Yemen?.
Pero claro la combustión de tanta leña y tanto carbón producirá una barbaridad de CO2, por lo que nuestras ciudades se volverán irrespirables, nada comparado con lo que desparraman los coches que utilizan el gasoil, pero no hay más remedio si queremos seguir a esa Venezuela tan añorada, porque el desarrollo sostenible que está siendo el verdugo de tantas y tantas empresas europeas, allí ponen la vela al pairo y les importa una higa, con lo que no se verdaderamente que tragedia se nos viene encima, pues fíjense ustedes que a pesar de que los países importantes del mundo, entre ellos por supuesto Venezuela, acordaron en 2017 la mejora en los tres lustros siguientes de sus condiciones de vida a través del proyecto sobre los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), a muchos venezolanos que pelean día a día por tener servicios públicos o llegar a fin de mes , ese plan les parece una quimera, basta pensar en el acceso al agua limpia, la fuente de la vida, por lo que lo sostenible, lo sitúan en el furgón de cola.
Pensando lo que podía ocurrir aquí, algunos venezolanos han pedido a su país, más leña, , traed madera, “más madera, es la guerra”, que diría Groucho Marx, entre ellos los de le embajada en Madrid, y ni corto ni perezoso, el amigo Maduro ha enviado a su amiga del alma Delcy Rodríguez con cuarenta maletas llenas de leños a Madrid, y la que se ha liado por tan poca cosa, hasta el Tribunal Supremo que ya es hermano del de nuestro país hermano y lógicamente opera de la misma manera, ha desestimado las querellas interpuestas por la oposición , que allí y aquí llaman ultraderecha (VOX) contra el ministro Ábalos , por los delitos de prevaricación, omisión del deber de promover la persecución de los delitos y el de usurpación de funciones. Pero como se le ocurre a la derecha denunciar lo que hace el gobierno ante la Justicia, por favor, que ya estamos en Hispanozuela. El “alto” tribunal, por supuesto señala que la tita Delcy entró en territorio español, menos mal, me han quitado un peso de encima, pero que en modo alguno existió delito por parte del banderillero, porque aunque tita Delcy vulneró la prohibición del Consejo de la UE de entrar en territorio comunitario, no hubo delito a pesar de que la tita tenía prohibido entrar en ese territorio, por lo que está acreditada la infracción, dice este valiente tribunal, pero esta infracción no es constitutiva de delito de prevaricación al ministro ya que “ las obligaciones derivadas de las decisiones de la Política Exterior de Seguridad Común de la UE, conocida por PESC, tienen una naturaleza esencialmente política, su incumplimiento implica la vulneración de una obligación en el ámbito de la política exterior de la UE”, por lo que el control de su vigencia y fiscalización corresponde al Consejo Europeo y no al Tribunal Supremo, por ello rechaza todas las querellas de la derecha y los maletones con los leños han podido llegar a sus destinos. O sea que es un delito “político” y el TS no está para eso, por lo que pueden entrar los leños libremente en España y la delincuente Delcy se puede pasear por el aeropuerto y su amigo ministro él, le da un besito de bienvenida pasándose por el arco del triunfo las instrucciones de la PESC, ¿Por fin ya somos Venezuela, perdón “Hispanozuela”?. ¿Pero cómo puede ser que una delincuente buscada por la policía de varios países no sea detenida al pisar suelo español en el aeropuerto ?, siendo además agasajada en la sala VIP y permitiéndole depositar cuarenta maletas sin control aduanero ninguno, diciendo las buenas lenguas que iban destinadas a su embajada y repletas de, según unos, oro, según otros, euros, otros dicen que estaba llena de droga y yo que estaba llena de leños. Por favor jueces, no vayamos tan rápido a lo que hoy es Venezuela. Déjennos habituarnos, acondicionarnos a o aclimatarnos gradualmente al estilo judicial imperante a orillas del Orinoco, pero no de golpe. Y un tipo, ministro él, que da diez versiones de lo ocurrido, con lo que quizás alguna sea la verdadera, solo comete una infracción “política”, muchas gracias TS por iluminarnos en la senda del “madurismo”, que ahora se prolonga con la “republirquía”, mediante la cual el próximo presidente de Venezuela será Nicolasito, el hijo de Maduro, que ya se presenta a las elecciones legislativas maduristas, es decir fraudulentas, de este 6 de Diciembre, como en Corea del Norte el coreanito hijo del coreanazo, con lo cual en España, el próximo presidente del gobierno será.., ¡ por favor yo tiro los leños, donde hay que bajarse!.