La consejera de Hacienda del Gobierno de la Ciudad va a presentar este mes al Pleno un Plan Económico-Financiero para “garantizar el cumplimiento de la Regla de Gasto” en la ejecución de los Presupuestos de la Administración local tanto este ejercicio como el próximo ante el informe de la Intervención que acredita su incumplimiento por un montante de 28,1 millones en la liquidación del año pasado “como consecuencia de una mayor ejecución de las cuentas aprobadas y por la falta de reconocimiento de subvenciones para financiar gastos incurridos con respecto a ejercicios anteriores”.
La propuesta no contempla la adopción de ninguna medida específica de no disponibilidad o racionalización del sector público, por ejemplo, porque “con la simulación efectuada de la liquidación de 2020 se da por hecho que, ante los nuevos acontecimientos producidos por la pandemia y las nuevas transferencias por parte del Estado y la Unión Europea, la propia ejecución del presupuesto permitirá cumplir con la Regla de Gasto, circunstancia que habrá de acreditarse en el momento de la liquidación definitiva”.
El análisis técnico acerca del respeto de la estabilidad, el endeudamiento financiero y la Regla de Gasto en la Ciudad en 2019 ha concluido que se ha cumplido con el primer principio (la Administración se encontraba en situación de superávit) y que el segundo “había seguido su senda descendente hasta alcanzar el 72,88% sobre los ingresos ordinarios”, pero que el tercero se había incumplido por haberse incurrido en un gasto superior al realizado en 2018 en un porcentaje más alto que el establecido por el Gobierno de la Nación, que coincide con la tasa de crecimiento de la economía española para ese periodo (2,7%).
Según los informes de la propia Intervención, las razones del incumplimiento “consisten fundamentalmente en un incremento relevante de la inversión, en un aumento (en menor porcentaje del capítulo de gastos corrientes) y en la falta de alguna de las transferencias corrientes por parte de la Administración General del Estado”.
Con cifras, la Intervención ha situado en un total de 28,1 millones el incumplimiento de la Regla de Gasto en el que se incurrió respecto al límite de los empleos no financieros obtenido de la aplicación de la Regla de Gasto para 2019.
Ello se atribuye, “con carácter general”, a “una mayor ejecución del presupuesto consolidado de la Ciudad, aprobado con sus correspondientes modificaciones presupuestarias, tanto a nivel individual como del resto de entidades que integran la entidad local, con respecto al porcentaje de ejecución de ejercicios anteriores, a efectos del cálculo de la norma”.
También a “el incremento del esfuerzo inversor respecto a ejercicios anteriores, lo que ha afectado directamente al gasto computable”. Concretamente la Ciudad ejecutó unos 10,6 millones de euros más con respecto al año económico 2018.
También se ha constatado un aumento de las obligaciones reconocidas en el capítulo de Gasto Corriente, fundamentalmente debido a tres causas. Por un lado, al incremento de los cánones, derivado del acuerdo para la cancelación de la deuda con la Autoridad Portuaria por importe aproximado de 950.000 euros.
Por otro, a la evolución al alza de las obligaciones reconocidas para los servicios de limpieza pública viaria en 2019 con respecto al ejercicio anterior en unos 3,3 millones de euros “debido a que en el año 2018 se realizaron detracciones en las facturas, con lo cual el gasto anual disminuyó en esa cantidad”.
Finalmente se ha identificado también un incremento del gasto dedicado al mantenimiento de los Centros de Menores que Intervención cuantifica en 1,8 millones y que achaca a que “se ha multiplicado por dos el número de menores no acompañados” atendidos por la Ciudad.
Los gastos de Personal también se incrementaron el año pasado con respecto al ejercicio 2018 “por la subida realizada en base a lo establecido en la Ley de Presupuestos”, aunque dicha evolución no es evidente en números “al figurar dentro del capítulo I el gasto correspondiente al Plan de Empleo y haber disminuido el mismo en 2019 en unos 3 millones de euros. Ello “enmascara” el gasto total, mientras que el importe de las subvenciones finalistas (menor gasto de cara al cálculo de la Regla de Gasto) disminuyó con respecto a 2018, según acredita la Intervención de la Ciudad en el Plan Económico Financiero elaborado para 2020 y 2021 que será sometido a la consideración de la Corporación.
El objetivo del Plan Económico-Financiero es “acometer, a lo largo de 2020 y 2021, las medidas correctoras que resulten necesarias a los efectos de que los empleos no financieros deducidos de las liquidaciones de los citados ejercicios resulten compatibles con el cumplimiento de la Regla de Gasto en esos años”. Tal y como se ha analizado por parte de la Intervención de la Administración local, en base a las estimaciones de ejecución realizadas la Ciudad “cumpliría con el objetivo de Regla de Gasto (y estabilidad y sostenibilidad financiera)”, por lo que no se ve necesario “tomar medidas adicionales de acuerdos de no disponibilidad, de racionalización del sector público, etcétera”. Uno de los factores que motivó el incumplimiento del año pasado fue precisamente la falta de pago de los 7,2 millones de los convenios del hecho fronterizo y la desalación (“mientras el gasto se ejecutó al igual que en años anteriores, no se pudo realizar el ajuste de ejercicios precedentes de menor gasto al no estar financiado con una subvención finalista”, advierten los técnicos en su diagnóstico), que supuestamente volverán a percibirse este verano.
Principio de 2012. La Ley Orgánica 2/2012 de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera establece que, con carácter general, la variación de gasto computable de cada Administración no puede “superar la tasa de referencia de crecimiento del Producto Interior Bruto de medio plazo de la economía española”. También regula la obligatoriedad de, en caso de incumplimiento de esta Regla de Gasto, la incumplidora tiene que formular “un plan económico-financiero que permita en el año en curso y el siguiente el cumplimiento de la Regla de Gasto”.
Sin medidas específicas de ajuste. Según la consejera de Hacienda el Plan redactado “no contempla la adopción de ninguna medida específica para asegurar el cumplimiento de la Regla de Gasto en los presupuestos de 2020 y 2021” porque su departamento entiende que, una vez efectuada una proyección de la ejecución del presente presupuesto en este ejercicio, “su propia evolución permitirá cumplir con los objetivos señalados, ya que el gasto final no excederá del producido en 2019 dadas las circunstancias sobrevenidas de situación de pandemia y las nuevas transferencias que se recibirán próximamente por parte de la Administración General del Estado”.
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