La Ciudad Autónoma de Ceuta ha sacado a licitación la ejecución del servicio de realización de test de antígenos y
vacunación de SARS-COV2. Con un valor estimado del contrato 577.735,92 euros y un importe 282.867,96 euros, el objeto del contrato es “el servicio de realización de test de antígenos y vacunación en cumplimiento de las
Estrategias de Vigilancia y Vacunación, aprobadas por la comisión de
Salud Pública” durante un periodo de un año con posibilidad de prórroga por otro año más. Sin embargo, como parte de la aclaratoria, explican que “en caso de que la vacunación se incluyera dentro de las campañas habituales o estacionales, o hasta que la circulación de SARS-COV-2 esté de manera prolongada en nivel bajo, el contrato se entenderá vencido”. En el contenido del informe económico del coste de la contratación para el servicio de realización de test de antígenos y vacunación, además de detallar la duración de un año, especifican que que son cinco horas diarias de lunes a viernes, con cinco trabajadores, una ambulancia y demás
material sanitario. Dentro de la clasificación detallan que se trata de servicios prestados por personal médico y por enfermeros. Se trata de un procedimiento abierto de tramitación ordinaria con presentación de la oferta electrónica, siendo el plazo de obtención de pliegos hasta el 9 de febrero a las 23:59 horas. Como parte de los anexos se agrega el informe de insuficiencia que destaca que la Consejería de Sanidad, Consumo y Gobernación, “carece de personal y medios propios para realizar el servicio a domicilio o traslado en caso de urgencia”.
La vigilancia de Covid-19
En lo que respecta a la justificación de la necesidad, han recordado que entre las competencias de la consejería está “el estudio, vigilancia y análisis epidemiológico de los procesos que incidan, positiva o negativamente, en la salud humana”, por lo que dentro del ámbito de su competencia realiza, entre otras, “la vigilancia de Covid-19”. Asimismo, han recalcado que “la Estrategia de Vigilancia y Control
frente a la Covid-19 tras la fase aguda de la pandemia en vigor desde el 23/03/2022, revisada el 8 de noviembre de 2022, documento aprobado por la Ponencia de Alertas y Planes de Preparación y Respuesta y por la Comisión de Salud Pública del Sistema nacional de Salud tiene entre sus objetivos, la vigilancia, prevención y control de la infección activa por SARS-CoV-2 y con especial seguimiento de la evolución epidemiológica en ámbitos y grupos vulnerables”. En lo que respecta a la evaluación del impacto de la Covid-19, han insistido en la necesidad de “vigilar los cambios de patrones epidemiológicos de la enfermedad así como la aparición de nuevas variantes que puedan condicionar una peor evolución de la epidemia, para poder tomar medidas de forma precoz”.