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Un grupo de niños de los talleres de la Unidad de Trabajo Social de Benzú pasó el día en el complejo de César Manrique
Un grupo de niños de entre 6 y 13 años de edad que participan en el taller de actividades lúdicas y formativas que realiza la Unidad de Trabajo Social (UTS) de Benzú intervino ayer en una jornada en el Parque Marítimo del Mediterráneo.
Dicha jornada se engloba en el marco de una actividad de ocio educativo infantil y juvenil cuyo propósito es favorecer la convivencia y propiciar la diversión de los pequeños que, durante todo el año, asisten a los talleres de educación en valores, hábitos de vida saludables o lectura y creatividad que se llevan a cabo en esta UTS.
La Consejería de Sanidad, Servicios Sociales, Menores e Igualdad ha querido así premiar a estos pequeños con una divertida y refrescante jornada en el emblemático parque de César Manrique.
En la Unidad de Trabajo Social de Benzú también trabajan con el colectivo de adultos para lograr la implicación de toda la familia en los asuntos que conciernen a los hijos y, por otra parte, con acciones puntuales, a fin de orientarlos en cuestiones laborales y ayudarlos con tutoría, tarea que se acomete de manera tanto individual como grupal.
Los niños se trasladaron hasta el Parque sobre las 11.00 horas y permanecieron hasta las siete de la tarde en el complejo lúdico donde disfrutaron de un baño, almorzaron y participaron en varias actividades organizadas por las monitoras que acompañaban al grupo. La UTS lleva a cabo diversas actividades durante todo el año, concretamente dos días a la semana (lunes y viernes), en horario de mañana y tarde durante los meses de invierno y únicamente por la mañana en verano.
El total de beneficiarios ronda la treintena en el caso de los niños y la veintena en el de los adultos. Los objetivos generales son implicar a las familias en la educación de niños; romper el aislamiento favoreciendo la convivencia y el encuentro; facilitar la adquisición de actitudes saludables; mejorar las relaciones personales, potenciar las habilidades sociales, la imaginación y la creatividad; transmitir confianza y seguridad; animar a la lectura; fomentar el trabajo en equipo; ayudar al enriquecimiento del vocabulario de los participantes; implicarlos en acciones de voluntariado y generar conciencia sobre cuestiones como la igualdad, o el respeto y cuidado del medioambiente, entre otros.
Otras de las metas que se marca dicha UTS pasan por lograr la autoestima instando a la participación; conseguir el protagonismo del colectivo con el que trabaja; favorecer la participación social y promover la relación grupal.