Chacón anima al nuevo teniente coronel a seguir la labor del anterior

La labor desarrollada por quien fuera teniente coronel al mano de la Guardia Civil, Ramón Cortes, estuvo presente ayer durante el acto de toma de posesión de quien ha tomado su testigo, el actual teniente coronel Andrés López García.

Fue el propio delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, el encargado de recordarlo, instándole a quien ahora manda en el cuartel a seguir la labor de Cortes, que ha estado marcada y definida por la buena relación con la plantilla y el cosecho de logros importantes sobre todo en materia de narcotráfico y efectividad del Servicio Marítimo. “Ha dejado el listón muy alto”, advirtió Chacón.
Ni al delegado le interesa que haya sobresaltos en un Instituto Armado sin altibajos, ni al nuevo teniente coronel apuesta por tener bajo su mando una inestabilidad continua, así que ambos, el primero a modo de consejo y el segundo a modo de promesa, hicieron referencia en sus discursos a la necesidad de seguir en esa senda establecida.
Durante el discurso de Fernández Chacón, con motivo de la toma de posesión del nuevo teniente coronel, se aludió además a la necesidad de que exista una cooperación entre las fuerzas de seguridad, una clave en la que también insistió el propio López García durante su intervención. “Hay que seguir profundizando” en la coordinación y cooperación de las fuerzas de seguridad “que junto a vosotros comparten esta dura, difícil y compleja misión, en un territorio muy especial y muy importante desde el punto de vista policial y de la seguridad para nuestra nación”.
Para Chacón resulta de vital importancia, y así lo recalcó, el papel desarrollado por la Benemérita, de ahí que quisiera recalcar la  “apuesta” que el Gobierno de España mantiene por el futuro de la Guardia Civil como uno de los “pilares fundamentales en los que se asienta la seguridad pública en nuestro país”. Dijo el delegado que existe un interés del Gobierno central por mejorar las condiciones laborales de los integrantes del Instituto Armado “en aspectos tan importantes como la conciliación de la vida laboral y familiar, continuando la senda emprendida en estos últimos años en aras de mejorar nuestra capacidad de respuesta a los retos diarios que se nos presentan”.
El nuevo teniente coronel no se quedó atrás en la recogida de los mensajes de Chacón. Por eso además de hacer públicas sus promesas, que intentará aplicar durante su mandato como máximo jefe del cuartel, también le recordó al delegado los deberes que la propia Guardia Civil espera que se cumplan. Así no se olvidó de mencionar la necesaria nueva Comandancia. “No quisiera dejar pasar la ocasión de hablar sobre la necesidad de una nueva comandancia para que se mejoren y modernicen las instalaciones donde trabajan y viven nuestros guardias, guardias que ahora prestan sus servicios en unas dependencias con más 60 años de antigüedad y que por consiguiente están construidas para el modelo policial de otra época. Actualmente necesita un relevo, cierto es que el Cuerpo lleva ya varios años con el terreno adquirido, pero también es cierto que hasta ahora han ido surgiendo otras necesidades, que no han permitido que se acometiera dicha empresa. La nueva Comandancia será otro de mis desvelos”, apostilló.
A esos desvelos se suman otros, por ejemplo, el conseguir “un trabajo bien hecho”, el “mejorar los servicios” o el de lograr una plantilla que trabaje cada vez mejor porque lo haga a gusto con su trabajo y las condiciones que le rodean. “Pienso dirigir mis esfuerzos a mejorar nuestro servicio al ciudadano, el que tenemos legalmente encomendado y que creo que es lo que nos debe guiar en el quehacer diario, pienso que todas nuestras misiones los podemos resumir en velar por el libre ejercicio de los derechos y libertades de los ciudadanos”.

El sueño del niño que jugaba a la pelota en el cuartel

Emotivo fue el discurso del teniente coronel Andrés López García, al estar marcado por recuerdos de su niñez y alusiones a miembros de su familia, lo que hizo llorar a quienes desde la zona de autoridades e invitados en las Murallas Reales seguían al pie de la letra sus palabras. Nada más jurar su cargo, López García confesó a los presentes que había conseguido cumplir el sueño que había tenido desde niño: el ser mando de una comandancia. “Hoy se cumple lo que para mí ha sido una de mis mayores aspiraciones profesionales, una meta a conseguir, como es el mando de una Comandancia, sueño que uno tiene prácticamente desde que entra en la Academia General Militar, en mi caso incluso antes cuando de niño jugaba en los patios de los distintos acuartelamientos del Cuerpo donde me he criado”, manifestó. Tuvo palabras de recuerdo y agradecimiento para su padre, “por mostrarme el camino y por inculcarme los valores personales que puedo poseer, pero sobre todo por enseñarme a ser guardia civil para así poder servir a España. Sé que hoy estará orgulloso”. Y las tuvo también para su familia, su esposa Elena y sus dos hijos, a los que agradeció “vuestro apoyo incondicional y vuestra infinita paciencia”.

Los protagonistas

José Fdez. Chacón: “Posee un brillante currículum profesional”

Tras dar la bienvenida oficial al nuevo teniente coronel, Fernández Chacón dijo de él “que posee un brillante currículum profesional y una inmejorable hoja de servicios desde su ingreso en el Cuerpo”. Unas palabras que le sirvieron para recomendarle que siguiera la labor desempeñada hasta la fecha por su predecesor.

Laurentino Ceña: “Tu selección da muestra de tus capacidades”

El general jefe de la Zona, Laurentino Ceña, destacó el papel por su destino como jefe de la comandancia de la Guardia Civil de Ceuta, recalcando que la selección de López “entre un buen número de tenientes coroneles que optaban a este cargo da buena muestra de tus capacidades. Capacidades que te serán muy necesarias”.

Andrés López García: “Los mandos que he tenido me han ido marcando y formando como guardia civil”

El tiempo que ha permanecido López García en la Comandancia de Hadú, primero como comandante y ahora como teniente coronel, ha tenido a varios mandos. Desde el apreciado y todavía recordado Julio Quílez, hasta Carlos Guitard Banet y el reciente Ramón Cortes. A ellos se refirió al decir que “de los tres he aprendido; los mandos que he tenido me han ido marcando y formando como guardia civil y es mirándome en todos ellos donde uno busca los referentes que junto con mi propia y personal impronta, me permitirán afrontar las distintas vicisitudes que se vayan presentando y seguir por la senda que ellos y todos nuestro predecesores nos han marcado, caracterizada por algo que nunca debe cambiar y de lo que debemos sentirnos orgullosos: el trabajo bien hecho”.

Entre época de cambios y respeto de los valores

En la Guardia Civil hay dos vías: o mantenerse en las tradiciones, lo que choca con el ímpetu de las asociaciones vinculadas a este Cuerpo que operan ya como sindicatos, o adaptarse a los cambios respetando siempre los valores de la Institución. Ayer el nuevo teniente coronel dejó claro cuál será la vía que escoja: la de los cambios y evoluciones, acallando de esta manera las voces tremendistas que incluso la AUGC llegó a plasmar en su colaboración semanal que bajo el título de ‘Casa cuartel’ publica cada domingo.
“La mejora de las condiciones laborales y en la prestación del servicio, será otra de mis inquietudes, en el entendimiento que una plantilla que trabaja a gusto, también trabaja más y mejor, lo que nos permite como decíamos prestar un mejor servicio al ciudadano”, indicó, dirigiéndose directamente a unos guardias a los que conoce “desde hace tiempo, sé de vuestra abnegación, de vuestros desvelos y de vuestra entrega, y quiero que sepáis, que valoro profundamente ese trabajo silencioso y constante que desarrolláis en primera línea, sin escatimar esfuerzos a pesar del cansancio, incomodidades y, muy a menudo, riesgo”, aclaró. “Las sociedades libres, democráticas y plurales”, añadió en una de las claves de su discurso, “se caracterizan por su capacidad para asumir y solventar nuevos retos; para ello han de producirse ciertos cambios que están marcados por la normal evolución de la misma”, indicó.
“Ahora nos encontramos inmersos, como el resto de los ciudadanos, en una época de cambios, cambios, que a pesar de las incertidumbres que pueden generar, más por la inseguridad que produce lo desconocido que por los cambios en sí mismos; sin duda, son beneficiosos pues responden a lo que nuestra sociedad nos demanda y lejos de provocarnos recelos, deben inspirarnos confianza y seguridad, ya que con ellos se pretende hacernos más fuertes y eficaces en nuestra labor para con nuestros conciudadanos, única razón, insisto, de nuestra existencia como institución. No obstante el cambio y la modernidad nunca pueden hacernos olvidar nuestros valores”, reseñó.