Este domingo, una vez más, los voluntarios de la
asociación Ceuta sin plástico acudieron al ‘rescate’ de la
playa del Tarajal. Para Cristian León, fundador de Ceuta sin plástico, “ha sido una pasada”, pues no han podido contabilizar aún los kilos de residuos, entre plásticos y embalajes, que han podido recoger. Hasta 100 sacos se han acumulado, una jaula entera de Ecoceuta, en apenas una hora, como acostumbra a operar la asociación. Lo han denominado como
“la cara B del porteo”, ya que lo que más se han recogido son los plásticos y embalajes producto de esta actividad y que se arrojan sobre la arena -algunos terminan en el agua- sin sanción alguna. Una problemática que no es desconocida para la asociación que ya ha acudido en varias ocasiones hasta mismo punto, llegando a proponer una serie de medidas para evitar la contaminación permanente a la que está sometida esta parte de la ciudad a causa de esta actividad. El pasado 22 de diciembre ya denunció, a través de su cuenta de Instagram, la situación en la que estaba la playa, toda llena de plásticos y cartones cubriendo la totalidad de la orillas. La imagen de este domingo era la misma, por lo que la asociación recordó, por las misma vía, las recomendaciones que en su día propusieron, pero que no se han tenido en cuenta.
Entre las medidas propuestas están dotar los alrededores con contenedores o jaulas para el depósito de estos residuos; la redistribución del ‘Plan de Empleo’ para que haya personal que controle el correcto depósito de estos residuos en los contenedores por parte de los porteadores; la presencia de una patrulla de “Policía Ecológica” que haga cumplir lo anterior descrito y, en caso de que estas medidas no funcionen, “solicitamos que se proceda al cierre de esta playa, ya que su único uso es el de depósito de residuos, de los cuales buena parte van directos al mar”, recriminan desde la asociación. Creen que si no se puede solucionar el hecho de que se arroje esta cantidad de basura a la playa, es mejor cerrarla al público y evitar la contaminación que está provocando, no sólo en la arena, sino en el mar. Incluso, velando por el gasto que la Ciudad ejecuta en la retirada continua de basura sobre este punto, opinan que cerrarla sería más práctico que enviar maquinaria para poder limpiar la playa, junto con los operarios destinados a esta función. Esperan que la Administración local tome en consideración estas medidas planteadas y se ponga fin, de una vez por todas, al problema de la contaminación en la playa del Tarajal.