El Tribunal de Cuentas (TCu) ha acordado que que las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla deberán presentar su Cuenta General al órgano fiscalizador a partir de la del año pasado “exclusivamente a través de la Plataforma de Rendición de Cuentas de las entidades locales”. Así lo ha decidido “en aras de la mayor eficiencia, eficacia y economía del control externo, así como para un mejor seguimiento de la gestión por parte del control interno”.
Dicha aplicación para la recepción, gestión, examen y explotación de las cuentas municipales está operativa desde el año 2007 y desde 2011 ofrece a los ciudadanos y a cualquier interesado un acceso sencillo y directo a la referida información.
Sin embargo, las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla habían quedado al margen del referido régimen general de rendición telemática de las Cuentas Generales de las entidades locales dada su pertenencia al Sector Público Autonómico.
El TCu ha estimado ahora que “al encontrarse sujetas en materia de rendición de cuentas a la legislación del Estado sobre Régimen Local”, así como a la vista del avance “en términos de eficacia, eficiencia y economía que supone la rendición a través de medios informáticos”, es oportuno “extender” a ambas administraciones el procedimiento de rendición telemática de la Cuenta General de los ayuntamientos.
El Pleno de la Asamblea aprobó el pasado 11 de enero la Cuenta General de la Ciudad de 2020, con considerable retraso con respecto a los plazos estipulados en la legislación vigente, que prescribe que una vez que la Corporación se haya pronunciado aprobándola o rechazándola, el presidente de la entidad local debe remitir la del ejercicio anterior al Tribunal de Cuentas “antes del 15 de octubre de cada año”.
La Cuenta General es el conjunto de documentos y estados que la entidad local tiene que elaborar una vez finalizado cada ejercicio para informar sobre su situación patrimonial; sus gastos, ingresos y beneficios o pérdidas; y cómo se ha ejecutado su Presupuesto. La Ciudad también debe sumar una Memoria justificativa de coste y rendimiento de los servicios públicos y otra demostrativa del grado en que se hayan cumplido los objetivos programados con indicación de los previstos y de los alcanzados y el coste de los mismos.
La última cifró el activo y pasivo consolidado de la Ciudad en 772,1 millones de euros. En 2020 sus ingresos ascendieron a 296,2 millones de euros y los gastos se situaron en 258,5. El resultado consolidado del ejercicio antepasado se situó, así, en 37,6 millones de euros en positivo frente a los 20,1 con los que se había cerrado el año anterior.
El tribunal de cuentas todos los años se cabrea kon ceuta y ceuta se lo pasa por la concha...