Ceuta es la región de España con menos contenedores de recogida selectiva de vidrio disponibles (solamente 115, casi tres veces menos que en Melilla) y en la que menos cantidad de ese material se recogen de forma separada, solamente 2,5 kilogramos por habitante, muy lejos de los 38,6 que se alcanzan en San Sebastián, líder nacional en esta materia según el Informe de Sostenibilidad 2022 que acaba de publicar Ecovidrio con datos correspondientes al ejercicio pasado.
El estudio sitúa a la ciudad autónoma a la cola de todo el país en reciclaje de vidrio y muestra que apenas ha avanzado nada con respecto a 2021.
Al contrario, si ese año en las calles de Ceuta había un contenedor por cada 696 habitantes, en 2022 la ratio se elevó hasta 723, lo que multiplica casi por cuatro la media nacional (193).
En términos de kilogramos de vidrio reciclado por vecino, en la ciudad se ha pasado de 2,1 a 2,5, lejos de la ratio estatal, que en 2022 se elevó hasta 19,8, cerca de nueve veces por encima.
En términos absolutos, el año pasado se registró un crecimiento en las toneladas recogidas a través del contenedor verde de un 6,2%. La hostelería sigue recuperándose, aunque todavía sin alcanzar niveles prepandemia. Sin embargo, el consumo ciudadano ha caído, sobre todo en los últimos meses del año, dejando el consumo aparente de 2022 en un crecimiento del 3,4%.
Ecovidrio mantiene acuerdos de colaboración con las administraciones públicas tanto a nivel local como autonómico para la mejora y cumplimiento normativo en materia de gestión de residuos de envases de vidrio. Gracias a dichos convenios de colaboración garantiza la cobertura de la práctica totalidad de la población española. Durante 2022 firmó acuerdos con la administración.
El Pliego de Prescripciones Técnicas del contrato adjudicado a Trace en 2013, que caducó en febrero, la obligaba a contar con 150 envases de recogida selectiva de vidrio.
Ninguna sorpresa... Poco o nada puede esperarse de una ciudad sin educación ni civismo alguno.