Ceuta arropa al Cristo de Medinaceli en su tradicional Besapiés

Los fieles del Señor de Ceuta han acudido a la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción para entregarle su fe y respeto a la sacra imagen. Este viernes por la mañana, una gran multitud ha asistido al tradicional Besapiés, un acto programado dentro del Triduo celebrado entre el 27 y el 29 de febrero. Es el broche de oro final a los cultos de cuaresma.

Previo al Besapiés se ha celebrado una eucaristía oficiada por el vicario general de Ceuta, Francisco Jesús Fernández Alcedo. Han asistido vecinos y autoridades de la ciudad para rendirle su devoción al Señor de Ceuta.

El Señor de Medinaceli estará expuesto hasta las 21:00 horas en la Santa Iglesia Catedral. En un ambiente solemne, los asistentes se han acercado al altar. Este 1 de marzo es, para los caballas, un día especial en su calendario.

Pronto sus fieles podrán arroparlo en las calles de la ciudad durante su traslado el próximo 16 de marzo, un acto previo a su salida en procesión.

Lo que significa el Señor de Ceuta

Vecinos que han acudido al Besapiés han trasladado a este periódico qué significa para ellos el Cristo de Medinaceli. Todos coinciden en que el Señor de Ceuta es una parte importante de sus vidas y que, de algún modo, los ha acompañado en momentos vitales de gran relevancia.

Es el caso de una vecina de la barriada del Príncipe: “Somos del Príncipe. En la parroquia del Príncipe me he bautizado, me he casado y he bautizado a mi hijo mayor”, cuenta.

La devoción del Señor de Ceuta no entiende de lugares. Muchas personas de distintas ciudades le profesan su fe. Una de las asistentes, originaria de Madrid, ha manifestado lo acogida y protegida que se siente cerca del Cristo de Medinaceli.

“En Ceuta se le tiene tal veneración y se le tiene respeto… Es muy especial. En mi casa siempre le he hemos tenido devoción. Me siento muy protegida con el Cristo de Medinaceli”, ha expresado.

Los vecinos de la ciudad se despiden del Cristo de Medinaceli y quedan a la espera de su salida en procesión para arroparlo de nuevo en las calles de Ceuta.