CCOO replica al delegado que daría cifras concretas si Ingesa aportase los datos que se piden

Se concentraron ante el Hospital unos 70 trabajadores para rechazar la gestión  en recursos humanos.

Cruce de declaraciones sobre la sanidad pública a raíz de la entrevista concedida ayer por Francisco Antonio González, delegado del Gobierno, a la Cadena Ser. Ante los micrófonos de esta emisora, el máximo representante de la Administración General del Estado en Ceuta criticó que cuando un “sindicato no es capaz de afirmar cuántas han sido exactamente las personas que han sido despedidas, es que utiliza números imaginarios para intentar llamar la atención de los medios”. Así respondió a la pregunta del periodista a propósito del “recorte de personal” en “más de cien personas”, estimado por el secretario general de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO, Ángel Lara, en la plantilla del Ingesa.
González rechazó que se llame despido a la finalización de contratos y recomendó que se “ajuste a la realidad” porque los responsables de la sanidad pública prestan “más atención a aquellas cosas que se ajustan a la verdad”.   
Por alusiones, el comisionista comunicó que daría cifras con mayor exactitud si la organización responsable de la sanidad asistencial en la ciudad aportase los datos que, los sindicatos en bloque, han solicitado en multitud de ocasiones. Hasta el momento, volvió a poner de manifiesto Lara, solo han recibido la plantilla orgánica del Hospital Universitario en 2013 pese a que también pidieron los datos de los centros de salud y otra información del clínico.
“A lo mejor, el delegado aún desconoce la cantidad de veces que hemos presentado escritos por esta razón”, ironizó el comisionista, quien recordó que los sindicatos solicitaron una reunión con la Ciudad Autónoma y el Gobierno de la Plaza de los Reyes hace un año pero han recibido la callada por respuesta. “Que demos cifras concretas tiene fácil solución: que la comunicación sea fluída entre Ingesa y los sindicatos”, propuso CCOO antes de señalar que el envío de información por parte de las directivas anteriores fue “exquisita, a diferencia de los actuales gerente y director territorial”.
Estas manifestaciones se producían después de que la Junta de Personal del Ingesa se concentrara ayer ante el Hospital Universitario en contra del “agresivo recorte de plantilla”, convocatoria que reunió a 120 personas –teniendo en cuenta que no todos los profesionales podían secundar la movilización– , según la organización, y según la Policía Nacional entre 70 y 80.  
Elisabeth Muñoz, presidenta de este órgano de representación de los trabajadores, planteó que si realmente Ingesa persigue aumentar la calidad asistencial, “lo primero que tiene que cubrir son los recursos humanos que atienden a la población”.
Esta portavoz del colectivo instó a “dejar ya de apostar por inversiones en gestión sanitaria”, cuando el modelo que hasta ahora se ha utilizado es “válido y vamos a priorizar el aumento de recursos humanos”. Muñoz se opuso a que se pierdan “casi 30 plazas de enfermería; 20 de celador; otras tantas de auxiliares de enfermería; pinches; electricistas; pintores y, en fin, de todas las categorías”. Desde la Junta señaló que hay categorías médicas en las que faltan efectivos por cubrir y, en general, “estamos sufriendo un recorte superior a la tasa de reposición que se establece para cualquier organismo en que se trabaja en una oficina y no en atención al público como es el caso de la atención a enfermos”.

Las unidades de gestión clínica

La presidenta de la Junta de Personal explicó que las unidades de gestión clínica son “positivas” cuando el “objetivo real” sea la atención al público, “no el recorte sanitario” ya que, añadió Muñoz, “estamos perdiendo efectivos de un día para otro”. Por su parte, Lara instó al Ingesa a explicar en qué consistirá este modelo en el marco de la sanidad ceutí porque, de lo contrario, “demuestran que ocultan algo”. Mariló Domínguez, vicesecretaria autonómica de USAE, relató que el pasado 25 de febrero tuvieron una reunión con la directora de Enfermería en la que ofreció a las auxiliares de enfermería en hospitalización una “asignación de pacientes y objetivos marcados”, es decir, una “unidad de gestión encubierta”. Malika Al-lal, delegada de CSI.F, se negó a hablar de “despidos” y pidió un pacto de reubicaciones tras la promoción interna y la OPE. 

Los sindicatos mienten al hablar de despidos, según Ingesa

La Dirección Territorial del Ingesa respeta cualquier manifestación, pero solicitó a los representantes de los trabajadores “que no falten a la verdad, que no hablen de ‘despidos’ porque es absolutamente falso, como falso fue cuando dijeron que se iba a privatizar la sanidad o que nos quedábamos sin transporte aéreo sanitario, entre gran alarmismo”.
La Administración lleva años haciendo un “formidable esfuerzo en Ceuta, independientemente del signo político que gobierne”, puntualizó la actual Dirección, lo cual se plasma en “mejoras” tanto estructurales –como el Hospital–, y de plantilla porque “no sólo se ha ido incrementando en los últimos años sino que, a día de hoy, goza de unos privilegios únicos en Ingesa”.
A través de los procesos de consolidación de empleo, explicó Ingesa, la plantilla ahora se compone, en su gran mayoría, de profesionales con plaza en propiedad, o sea, con un puesto de trabajo estable, trabajando a jornada completa, “cuando en Andalucía, sin ir más lejos, a algunos especialistas con más de 20 años de experiencia se les está reduciendo su jornada al 75 por ciento”. Además, prosiguió, “aquí se cobra la productividad al completo y la carrera profesional, que en otras comunidades se ha dejado de pagar. Aquí se está reconociendo el nivel 4 de carrera profesional que hace tiempo dejó de reconocerse en el resto. Todo esto son mejoras salariales que, según afirman algunos representantes sindicales, ‘roza el antisindicalismo’”.
En cualquier caso, Ingesa recordó el “estado de recesión económica, en el que es absolutamente imprescindible hacer una racionalización realista y eficiente de los recursos económicos”, que se traduce en medidas que incluyen “no contratar más plazas si no son absolutamente imprescindibles, pero nunca despidos”.