CCOO entrevé otro ahorro en la demora del contrato de gestión

Ingesa firma las directrices para 2015 “cuando han pasado cuatro meses del año a evaluar”.

La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO valoró ayer la firma en Madrid del contrato de gestión del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), el documento que establece las directrices de la actividad del año presente, así como el contexto en el que se produjo la rúbrica.
Precisamente, en la última evaluación de la carrera profesional relativa al año pasado, este sindicato encontró con que se ha “penalizado a todo el personal de Atención Primaria por incumplir los objetivos cuando es la misma empresa la que está incumpliendo los plazos y su obligación de trasladarlos de forma clara y con antelación a los trabajadores”.
El resultado de este “despropósito”, como lo tildó la central, es que al final la carrera profesional o la productividad, “que deben ser incentivantes”, se convierten en un elemento de “indignación” entre los trabajadores que se ven “impotentes” ante una evaluación de su trabajo “a todas luces injusta”.
Los comisionistas se resisten a pensar que las demoras en la aprobación del contrato de gestión, así como los “retrasos que se están produciendo ya este año” en la evaluación de los niveles profesionales, sean utilizados “conscientemente como un elemento más de ahorro por parte de la administración”.
En ese listado de “despropósitos” apuntados por la Federación encabezada por Ángel Lara, criticó que los objetivos a cumplir por los trabajadores este año se firmen cuando han transcurrido cuatro meses del año a evaluar. “Lo lógico sería que el plan estuviese preparado y planteado a los trabajadores (en la parte que les afecta) antes de comenzar el año”, expuso CCOO en un comunicado. Con ésto, la central se refiere a una exposición “clara” de los objetivos que se van a exigir a los trabajadores y el “compromiso” por parte de estos en su cumplimiento.
Ya repasando el anterior contrato de gestión correspondiente a 2014, esta Federación de Sanidad consideró que “al menos” dos de las tres prioridades que se marcaron han sido “incumplidas”. Por un lado, Ingesa afirma su “compromiso para ‘garantizar la mejor atención sanitaria posible a los ciudadanos’” que, a su juicio, difícilmente casa con la “pérdida constante” de puestos de trabajo o con el “recorte horario” de Atención Primaria “sin el refuerzo de los servicios de Urgencias a que se comprometieron, o con la aplicación en exclusiva a los ceutíes del repago sanitario”.
Y por otro lado, prosiguen los comisionistas en su nota de prensa, se debe “‘asegurar la participación activa de los distintos colectivos en el desarrollo de los objetivos’, prioridad incumplida de cabo a rabo en la medida en que los trabajadores no se sienten partícipes en absoluto en el diseño de los objetivos a cumplir”.
Por último, ante la afirmación del director de Ingesa acerca del mantenimiento del Capítulo 1 (correspondiente a gastos de personal) “solo podemos señalar que la evolución de la plantilla de nuestra sanidad ha sufrido un decreto sustancial perdiendo decenas de trabajadores de todas las categorías que no han sido repuestos y que han convertido en rutinarias las situaciones de sobrecarga física en nuestros centros sanitarios”.

La “burla” del centro de salud del Tarajal

CCOO recordó que antes del inicio de la campaña electoral de 2011, los anteriores directivos y el delegado del Gobierno afirmaron que en “un año dotarían las inversiones” para la reforma del centro de salud del Tarajal y que en 2014 estaría inaugurado y operativo. “Pues bien, toda una legislatura después, cuando queda un mes para otra campaña electoral, los directivos adjudican la redacción del proyecto (...) después de cuatro años sin solucionar esta imperiosa necesidad”, denunció la central, lo que considera una “burla”.