Carta al presidente de la Comunidad Islámica de Ceuta

Ya me siento capaz de redactar estas líneas, sin que la pena, rabia e impotencia inunde mis ojos de lágrimas por la pérdida del ser más grande en mi vida “mí madre” en la madrugada del martes 13 de septiembre. El ser que me dio la vida se entregó a Dios cerrando sus ojos y se marchó para siempre…mujer de oración y de paz. Y así estuvimos en silencio y en paz como ella quería. La muerte no tiene excusas y cuando llega solo podemos dejarla pasar.
Varios familiares acudimos a resolver los trámites legales para trasladar el cuerpo de nuestra madre a casa, donde  pudiera ser honrada, velada y llorada por sus seres queridos. Todas aquellas personas con capacidad para resolver los trámites legales, con la pena por la muerte de un ser tan querido y ante una de las situaciones mas difíciles a las que tiene que enfrentarse el ser humano, chocaron con un obstáculo insalvable “localizar al funcionario municipal de guardia del Cementerio Musulmán”, y que a la vez, también es Presidente de la Comunidad Islámica en Ceuta y Presidente de su barriada. ¿Qué de cosas, verdad?
El iluminado, está tan cansado que, como norma, no coge el teléfono de madrugada cuando le toca hacer sus guardias. ¡La noche está para dormir!
Sí, claro, pero…cuando no te paguen nocturnidad o cuando no custodies los documentos legales de la Consejería de Sanidad necesarios para el traslado de cadáveres. Esto se llama “dejación de funciones”, y si no recuerdo mal, la Ley 7/2007 del Estatuto Básico del empleado público, establece en el régimen disciplinario de los funcionarios como falta muy grave “el abandono del servicio así como no hacerse cargo voluntariamente de las tareas o funciones que tienen encomendadas”, “el notorio incumplimiento de las funciones esenciales inherentes al puesto de trabajo o funciones encomendadas”, e igualmente son faltas graves recogidas en Convenio colectivo, “el abuso de autoridad en el ejercicio del cargo”, “las conductas constitutivas de delito doloso relacionadas con el servicio o que causen daño a la Administración o a los administrados”, “la grave falta de consideración con los administrados”. ¡No te equivoques iluminado!
Mi hermana, ante la desesperación y la negativa de atender la llamada, fue a su domicilio a despertarlo, abriendo su hijo enfadado y de muy malos modos contestándole que no eran horas de pegar en casa de nadie. ¡Empezó entonces un nuevo calvario! Pues, al iluminado no le quedo más remedio que ir al hospital. ¡Imaginad…le habían roto el sueño al funcionario iluminado! El trato que recibimos por quien suponíamos debía ser el garante funcionario de la Administración…. fue esperpéntica, una actitud fría, despectiva y deshumanizada que mostró desde el primer momento que manifestamos nuestra intensión de llevarnos el cuerpo de nuestra madre a casa. Citaré textualmente sus palabras “mejor dejar el muerto en la nevera, se mantiene mejor” ¡Que delicadeza!  El muerto era mí querida madre, pero no contesté ante tal provocación…continuó hablando con mi hermana y con el médico que asistió a mi querida madre, y el iluminado, ni corto ni perezoso, dejo el documento de certificado de defunción y dijo que por la mañana vendría. Le pedí que por favor dejara el teléfono encendido… Entonces el iluminado, me contestó que todo era distinto porque yo “trabajaba en la casa, los médicos nunca están para firmar” ¡Eso es mentira!, y no contento con arremeter contra mí persona empezó a meterse con el turno de noche que se encontraba de guardia en el hospital.
Continúo llamándome pija del PP y cuando te marchabas no te cortaste de decirme “hija de puta” con el cuerpo presente de mí querida madre . ¡Iluminado! Sí soy del PP, como me dijiste ¿Pero eso que tiene que ver con la muerte de mi querida madre? Yo soy una ciudadana más que contribuye con sus impuestos a que usted iluminado tenga una nómina como funcionario. Le dije que iría a recursos humanos del Ayuntamiento a dar conocimiento de los hechos ocurridos, y usted con la amabilidad que le corresponde me contestó que me fuera a Castillejos a reclamar. Creo que el subconsciente le jugo una mala pasada porque ¡iluminado usted es funcionario de la Administración Local y pertenece al Estado Español!…. ¿Aclarado?
Recuerde siempre aunque no se si entenderás lo que voy a escribir a continuación… “Los humanos somos como las rosas, mientras somos jóvenes y gozamos de buena salud no pensamos nunca en este principio de descomposición que trabaja en nosotros y que un día acabará triunfando. Tendemos a creer que el mundo nos pertenece y que el futuro no dejará de sonreírnos ¡Que decepción cuando sentimos que en el plano físico todo comienza a escapársenos! En esta lucha sin cuartel que se ha entablado entre el principio de la vida y el principio de la muerte, algunos quieren retener la vida a toda costa y esto puede llevarles a cometer los actos más insensatos…malgastan en la batalla todos los recursos que deberían utilizar para su trabajo espiritual y lo pierden todo. Para todos aquellos que han decido de forma voluntaria entregarse al mundo religioso y espiritual…No hemos venido a la tierra para permanecer en ella eternamente jóvenes y en buena salud, sino para hacer unas buenas prácticas, un aprendizaje.
El sabio es aquél que conoce la curva del camino y se esfuerza en utilizarlo todo. En el mundo religioso y espiritual, la ascensión es ininterrumpida…Aquí en la Tierra por mucho que nos esforcemos, veremos cómo progresivamente nuestra frente y nuestra mejillas se arrugan, nuestros cabellos se vuelven canosos, los dientes se caen, etc.… Pero debemos comprender que el aspecto exterior no tiene ninguna importancia si detrás se manifiesta el resplandor de la vida espiritual”
“La muerte llama, uno a uno, a todos los hombres y a las mujeres todas, sin olvidarse de uno solo -¡Dios, qué fatal memoria!-, y los que por ahora vamos librando, saltando de bache en bache, jamás llegamos a creer que fuera con nosotros, algún día, su cruel designio”.