Será uno de los objetivos primordiales del segundo contrato que se licitará
Carreira asegura que una de las principales obligaciones que tendrá el segundo contrato de limpieza será dar respuesta a la situación de suciedad que se produce en todos los aledaños de la frontera, porque, en el actual contrato de Trace figura como un calle más de nuestra ciudad. Es más, asegura que la frontera es un punto negro de manera permanente.
Es uno de los ejemplos que pone el consejero de Medio Ambiente y Sostenibilidad para explicar las razones por las cuales el equipo de Gobierno se ve en la obligación de incluir en los Prespuestos de la Ciudad para el año que viene, que ya han sido aprobado inicialmente por parte de la Asamblea con el apoyo del grupo parlamentario del Partido Popular.
Por otro lado, otro ejemplo concreto es la limpieza de toda la zona del Recinto, “donde se encuentran los acantilados donde podemos ver un gran número de frigoríficos y lavadoras tirados”.
Hace algo más de un mes, cuando este segundo contrato de limpieza tuvo un problema grave para salir adelante debido a distintas interpretaciones que se hacía por parte de los técnicos que eran los encargados de la redacción de los distintos pliegos, tanto el de cláusulas administrativas como el técnico, el propio consejero llegó a decir que no entendía la situación. Preguntado sobre este aspecto asegura que “por supuesto, no estoy quejas de los funcionarios y he tenido de todos ellos la máxima colaboración para el cumplimiento de los objetivos que nos hemos propuesto. El problema es que no entiende como, en ocasiones, la legislación puede ser tan enrevesada que no permite mejora la limpieza como es el objetivo del equipo de Gobierno”. Incluso fue un poco más lejos sobre ese papel que deben jugar los funcionarios en el sentido de que “me gustaría que la defensa del interés general no sea únicamente del Gobierno, sino del conjunto de la Administración en general”.