Algunos residentes del CETI intercambiaron historias y opiniones sobre la paz, con motivo del Día Internacional. La Biblioteca Pública se situó como el lugar de encuentro entre estos jóvenes y el resto de participantes que asistieron a escucharles
“Paz”, “no violencia”, repetían algunos residentes del CETI. Unos jóvenes que conocen perfectamente lo que significan estos términos y que ayer, ‘Día de la Paz’, pusieron de manifiesto en la Biblioteca. Allí recordaron con sus acciones que se trataba de una jornada para conmemorar y fortalecer los ideales de paz en cada nación y cada pueblo.
La actividad organizada entre el CETI y Cruz Roja tuvo como objetivo explicar a estos jóvenes, que no pasan de los 25 años, los conceptos de ‘paz’ y ‘no violencia’ y su importancia para la sociedad, explicaba el técnico de Integración Social de Cruz Roja, José María Guerra. Aunque al principio se mostraron algo tímidos los chicos se fueron soltando a medida que sintieron el calor de otros iguales que se prestaban a su actividad. Algunos además quisieron compartir la dura tragedia que supuso llegar hasta aquí, como fue el caso de Soufiane Sarr originario de Guinea, quien después de más de un año y medio de viaje, hace un mes consiguió saltar la valla, hoy dice sentirse “muy feliz” tras haber alcanzado su meta.
La Biblioteca se configuró como un lugar de encuentro y de intercambio con el resto de la sociedad caballa, un día que, aseguran desde Cruz Roja, los residentes esperaban con “emoción”. Además apuntaba Guerra, para muchos de ellos que, ya habían trabajado la actividad en el centro, ha tenido un efecto terapéutico. “Con estos talleres han podido sacar, en cierta medida, la parte negativa de todo lo que han padecido, puesto que la gran mayoría procede de zonas en conflicto, y ha sido una actividad que han vivido con mucha intensidad”, comentaba. El taller, promovido por el área de ocio y tiempo libre de Cruz Roja alcanzó el objetivo marcado que no era otro que trabajar entre iguales, dar un paso más hacia esa integración.