En estas fechas, con la proximidad de las elecciones y teniendo en cuenta todo lo acontecido, da la sensación, (observando la actitud de algunas formaciones políticas), que hubiéramos dejado de ser ciudadanos y ciudadanas de Ceuta, para convertirnos solo y exclusivamente en VOTOS. Siguen inmersos en el empeño de mantener viva la polémica de las declaraciones emitidas en el Senado, haciéndole flaco favor a la ¿convivencia? que abanderamos por todos los rincones y que en situaciones como ésta, muestran una vez más, que estamos, por desgracia, más cerca de la coexistencia que de la tan nombrada “convivencia”.
Manteniendo la chispa de la confrontación y provocando a la ciudanía con el cruce de acusaciones, no estamos (metámonos todos y sálvese quien pueda) contribuyendo a un clima que favorezca la convivencia entre iguales y la erradicación de prejuicios como el racismo, que dan como resultado complejo de inferioridad en algunos casos y complejo de superioridad en otros. Es momento de aportar, es momento de fomentar el respeto por la diversidad cultural y potenciarla, pero desde luego, fomentando bandos, sin lugar a dudas, perdemos todas las personas que conformamos esta Ciudad.
Este es momento de mostrar e informar a la ciudadanía sobre cuáles son las propuesta de mejora, y de cuál es el programa de trabajo que tiene cada formación; éste es el momento de elaborar unas listas que reflejen la realidad de cada partido, escapando de las ya conocidas “listas floreros” y poner de manifiesto el contexto multicultural que caracteriza a ésta mágica tierra, a la que al parecer, algunos quieren poco, puesto que pretendiendo ser o parecer más “caballas” que nadie, no hacen más que fomentar el mal estar ciudadano, el enfrentamiento y las tertulias rancias de cafeterías.
No sé si compartirás conmigo esta reflexión, pero a mí este tema, ya e cansa y sobre todo me aburre.