Hasta tres fuegos en los alrededores de la calle Adoratrices en los últimos 15 días. Una cadena de
incendios que preocupa a los vecinos y del que bomberos han informado en su balance nocturno del lunes al martes: en primer lugar ardió matorral, aunque también hablan de una moto y, en segundo lugar, un coche.
La quema que inauguró esta sucesión de hogueras fue documentada por este periódico el pasado 27 de octubre. Desde entonces, los vecinos de los alrededores están sobrecogidos. El Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento de Ceuta (
SEIS) recibió el aviso del 112, en torno a las 23:25 horas, por una quema de matorral en Arroyo Paneque, entre Manzanera, los Grupos del Rocío y la calle Adoratrices. Bomberos indica que fue de escasa magnitud porque la dotación desplazada hasta el lugar regreso al Parque poco tiempo después con el trabajo de extinción realizado. Sin embargo, el teléfono de Bomberos volvió a sonar sobre las 4:20 horas, de nuevo por una llamada del 112, para alertar de otro incendio en Arroyo Paneque que, por la fotografía que acompaña a la información del servicio, bien se puede tratar de la propia calle Adoratrices. En esta ocasión, ardió un vehículo cuyas llamas apagó con éxito la dotación movilizada. El resplandor del fuego y el humo asustaron a los vecinos de los alrededores, que llevan al menos 15 soportando unos hechos que, ya a finales de octubre, ocurren dentro del horario del toque de queda. Bomberos aseguran que esta misma noche del lunes al martes una moto también fue pasto de las llamas, y ubican su quema antes del incendio del vehículo en calle Adoratrices. Aunque en ningún momento el SEIS apunta a que sean incendios intencionados, parece que no todo el mundo está obligado a cumplir la nueva limitación horaria del estado de alarma, por la cual está prohibido permanecer en la vía pública salvo causa justificada entre las 22:00 y las 7:00 horas. Si no, ¿cómo se producen incendios prácticamente todas las noches en Ceuta?
Arden dos vehículos junto al fortín del Príncipe
Y esta tarde, en torno a las cinco y media, una dotación completa del SEIS se ha desplazado hasta la barriada del Príncipe, en concreto a los aledaños del fortín. Cuatro bomberos y un cabo, en sendos camiones, se han encargado de sofocar las llamas de los dos vehículos que ardían, todo apunta a que de manera provocada y no fortuita, en el lugar. Hasta allí se han desplazado escoltados por la policía, como manda el protocolo establecido, y hasta que la zona no ha estado asegurada, no han realizado la intervención, para evitar así posibles apedreamientos. El incendio no ha presentado más dificultades de las habituales en estos casos.